Para el ministro Rosúa, las medidas de Apropol "rozan lo delictual"

El gremio policial continúa apostado en el Concejo

Mientras los miembros de gremio policial Apropol continuaban "acampando" en las gradas del recinto de sesiones del Concejo Municipal, la respuesta de las autoridades no fue alentadora. El ministro de Gobierno, Roberto Rosúa, confirmó las sanciones y aseguró que "afectarán a todos los involucrados, e irán desde arrestos a cesantías". Así, todo indicaba que pasarían una nueva noche en el Palacio Vasallo reclamando que queden sin efecto los 41 pases a disponibilidad contra los efectivos involucrados en la protesta del 13 de abril.

La "toma pacífica" -como la llaman los policías- comenzó anteayer a las 11.30, cuando un grupo de agentes y familiares ingresaron al Concejo en plena sesión. Primero hubo cánticos y después el delegado adjunto de la entidad, Jorge Aguiar, planteó el reclamo.

Tras la intervención del juez Juan Carlos Curto y la decisión de los ediles de no realizar un desalojo por la fuerza, los manifestantes pasaron la noche en las gradas donde instalaron una carpa azul y un enorme cartel: "Corrupción o seguridad".

"El gobierno no busca una salida, agrava el conflicto", indicó el titular de Apropol Rosario, Alberto Martínez, quien continuó: "Con una soberbia inaceptable, los funcionarios no se responsabilizan del conflicto".

Así, indicaban que los canales de diálogo estaban "absolutamente cerrados" y sostenían que no se moverían del lugar.

Lo cierto es que las declaraciones del titular de Gobierno estuvieron lejos de ser conciliadoras. Es más, el funcionario confirmó las sanciones diciendo que "se ajustarán a la ley de la policía con garantía de derecho de defensa, pero van a afectar a todos los involucrados e irán desde los arrestos a las cesantías teniéndose en cuenta agravantes y atenuantes".

Pero como si fuera poco Rosúa también se refirió a la metodología de protesta adoptada por Apropol y, en ese sentido, consideró que "son medios que los alejan de los reclamos administrativos funcionales y se están encuadrando en la alteración del orden público porque rozan lo delictual".

Mientras tanto, Martínez no sólo insistió que la organización "persistirá" en la medida, sino que además calificó a las sanciones como "un pase de factura por las denuncias de corrupción que el gremio viene haciendo públicamente desde hace tiempo".

Sin embargo, el ministro de Gobierno desmintió que "haya existido un compromiso de no sancionar a quienes se involucraron en este acto de insubordinación", como sí señalan los dirigentes de la organización.

Y más aún, el funcionario también hizo referencia a las denuncias de corrupción y aseguró que "serán bienvenidas siempre que presenten las pruebas en la Justicia o en el Poder Ejecutivo".

Lo cierto es que al cierre de esta edición los miembros de Apropol, que participaban de la "toma pacífica" del Concejo, continuaban en el recinto de sesiones dispuestos a pasar otra noche en el lugar. Mientras tanto, el presidente del cuerpo, Agustín Rossi, reiteró la decisión de no realizar un desalojo por la fuerza y señaló que "sólo se puso en marcha un operativo para resguardar el palacio".

"Este es un ámbito de democracia y queremos mantenerlo por fuera de cualquier violencia -continuó Rossi-. Además, el juez nos indicó que en tanto no se vean entorpecidas las tareas del Concejo, no hay delito".

Además el titular del cuerpo hizo referencia a la mediación que realizaron algunos concejales ante funcionarios del gobierno provincial. En ese sentido, dijo: "La única respuesta que tuvieron los ediles es que esta toma agrava el conflicto policial más todavía".