El Flaco renunció por tercera vez al rojo. Se fue criticando a la dirigencia

Menotti se fue de Independiente

El entrenador César Luis Menotti renunció ayer a Independiente y se lamentó porque, según declaró, no pudo cambiar "veinte años de cagadas dentro del club y dentro de la historia del fútbol argentino".

Luego de anunciar su desvinculación, admitió que los malos resultados deportivos condujeron a esta situación, pero también el clima político reinante en la institución, que se apresta a renovar sus autoridades en los próximos días.

"No soy tan inocente de pensar que desde el no-éxito se puede cambiar algo. A veces ni desde el éxito se puede cambiar la historia miserable de este fútbol nuestro", comentó.

Y enseguida agregó: "Lamento mucho que en tres meses no pude cambiar veinte años de cagadas dentro del club y dentro de la historia de este fútbol; era muy difícil".

"Lo vengo diciendo desde hace veinte años, después del Campeonato del Mundo (1978) dije que las copas son para ponerlas en las vitrinas y lo único que daban era la fuerza de poder cambiar esta historia".

"Y cuando digo este fútbol miserable me refiero a lo que gana un futbolista de divisiones inferiores, cómo se trata a un jugador. Y cuando uno intenta hacer algo diferente, es bastante complicado", reconoció.

Arremetió también contra las estructuras dirigenciales del fútbol argentino y, sin nombrar a nadie, indicó: "Disentir con el poder te convierte en un subversivo y no son ni siquiera inteligentes para escuchar al que disiente a ver si aporta algo útil".

Respecto de Independiente, club del cual es socio además, Menotti reconoció que se va para "descomprimir un poco la situación". "No quiero perturbar a quienes me trajeron. Que el socio tenga la libertad más allá de la designación de un entrenador", subrayó Menotti.

"Creo que el clima político es fundamental, porque la intención es un proyecto de cambio que creo que este club necesita, como también lo necesita el fútbol argentino", insistió.

"Hay cosas que son insostenibles. Y también hago una denuncia pública al Estado, que está obligado a defender, vigilar a las sociedades sin fines de lucro, que le pertenecen a la gente", dijo Menotti.

Y concluyó: "Yo no me rindo, porque pertenezco a la familia del fútbol, la auténtica, la que tiene como premisa defender lo nuestro: que el fútbol le pertenezca a la gente, a los clubes, y no a cuatro vivos".

"En tres meses no pude cambiar 20 años de cagadas en el club"