Los militares no controlan a la insurgencia

Bogotá. - La batalla por el control de la población colombiana de Toribío, en el departamento del Cauca, aún continúa y ha dado pie a una gran controversia, porque puso en entredicho la capacidad del gobierno para resolver los ataques sostenidos de las Farc en regiones apartadas del país. El ministro de Defensa, Jorge Uribe, ha manifestado insistentemente que la fuerza pública sí tiene control sobre la situación que se vive en esa localidad y que ese ataque no ha perjudicado en nada la política de seguridad oficial. "Lo que hubo en Toribío fue un nuevo accionar de guerrilleros francotiradores, que están infiltrados en el pueblo. Nosotros estamos detrás del grueso de la columna que atacó la población", dijo el ministro Uribe al desmentir que los rebeldes hayan atacado nuevamente a esa población.

Asimismo, añadió que las fuerzas del Estado tienen los recursos suficientes para "devolverle la tranquilidad a la población". Esos recursos, sin embargo, han sido puestos en duda por el alcalde de la localidad, Arquímedes Vitonas, y por el congresista Elmer Arenas. El legisladora declaró que no es cierto que el gobierno tenga los recursos para controlar la situación que vive la localidad.

Arenas aseguró que la cantidad de efectivos militares en la zona disminuyó porque un batallón fue ubicado en el vecino departamento del Valle, otro fue afectado por leishmaniasis, y el último fue desplazado a las selvas del sur de Colombia en el marco del Plan Patriota, la mayor ofensiva contra las Farc en cuatro décadas de conflicto.

Por su parte, el alcalde de Toribío, Vitonas, dijo ayer que no hay ningún control militar en la zona y que los alimentos ya empezaron a escasear. "Los alimentos comenzaron a escasear en toda el área urbana, en las tiendas, y la ayuda de la estatal red de solidaridad en alimentos no ha llegado. Nos tocó decirle a la gente (indígenas de otras regiones que se desplazaron para defender a Toribío) que se fuera porque no hay comida", dijo el burgomaestre.

Vitonas también indicó que las fuerzas guerrilleras están más cerca de lo que se ha reconocido por el gobierno nacional y añadió que los guerrilleros han anunciado que volverán a atacar en las próximas horas.

Miembros de la fuerza pública han dicho que se sospecha de la colaboración de varios habitantes del pueblo con las Farc.