Año CXXXVII Nº 48659
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Economía
Escenario
Mujer
Señales
Turismo


suplementos
ediciones anteriores
Salud 09/02
Autos 09/02
Turismo 06/02
Mujer 06/02
Economía 06/02
Señales 06/02

contacto
servicios
Institucional

 domingo, 13 de febrero de 2005  
Política monetaria. Se complica la intervención en el mercado cambiario
El BCRA, obligado a cambiar de libreto para contrarrestar la inflación en 2005
Analistas destacan lo actuado por la autoridad monetaria hasta aquí pero advierten un nuevo escenario

La inflación de enero, la más alta en 29 meses, disparó un alerta sobre qué puede ocurrir con los precios este año. Mientras el gobierno salió a aclarar que el 1,5% de aumento era provocado por factores estacionales como la demanda por turismo y esparcimiento, algunos analistas estiman que detrás de la escalada del Indice de Precios al Consumidor (IPC) también se esconden factores monetarios, de índole más estructural, y hacen advertencias sobre lo que se puede venir de aquí en adelante si el Banco Central (BCRA) no reacomoda el rumbo de la política monetaria a futuro.

Así, los analistas del Banco Río, Juan Pablo Cabrera y Rodrigo Park, explican que "existen varias razones para pensar que hay factores monetarios detrás de la reciente suba de la inflación que no desaparecerán en el corto plazo y que conllevan un riesgo para la política del BCRA en relación al cumplimiento de las metas fijadas por el programa monetario".

Los especialistas hacen para esto una comparación de los componentes de la inflación y efectúan comparaciones anuales -donde desaparece el componente estacional- para justificar el análisis.

En ese sentido, explican que el componente estacional de enero fue "significativo", debido a la suba de los precios en esparcimiento (5,8% con respecto a diciembre), asociadas con el inicio de las vacaciones de verano.

Por sí mismo, "este ítem contribuyó a la inflación de enero en 0,5%, es decir un tercio del total", explican. Sin embargo, si bien este tipo de aumentos "es un hecho habitual para el mes, la suba de enero de 2005 fue más pronunciada que lo habitual, frente al 3,9% de enero de 2004 y el 4,8% de enero de 2003".

De este modo, las variaciones interanuales no dan lugar a ambigüedades: "A junio de 2004, la inflación en esparcimiento era de 4,6%, saltando en enero de 2005 a 10.1%", dicen los especialistas de Banco Río.

En este rubro, "la suba de precios no parece tan sólo estacional y abona la hipótesis de una demanda interna quizás demasiado intensa", agregan.

Lo mismo podría pensarse para el rubro indumentaria, en el cual por razones estacionales en enero de 2005 se registró una baja de 1,9%, bastante menor a la baja de 3,2% de enero de 2004.


La política del Central
Con la meta puesta en consolidar la estabilidad de los precios, el BCRA adoptó fundamentalmente a lo largo de 2004, una serie de medidas que no sólo cumplieron con ese objetivo sino demás lograron recomponer significativamente el nivel de reservas, mantener el tipo de cambio y la tasa de interés en los niveles deseados.

Pero estas herramientas que permitieron alcanzar los objetivos de largo plazo no son un remedio de por vida. Así lo advierten desde el Centro de Estudios Bonaerenses (CEB).

En tal sentido, advierte que "el contexto contribuyó a la consecución de las metas en general", pero que "lo más complicado en materia de intervención monetaria y control inflacionario aún no ha llegado".

Desde el CEB señalan que este año las condiciones podrían ser distintas y por tanto, el Banco Central deberá "seguir innovando para llevar adelante un manejo adecuado de la política monetaria".

El cambio de escenario podría darse especialmente por "los incrementos salariales, que podrían disparar este año, generando presión de los precios en una economía que presenta cuellos de botella en varios sectores productivos a partir de mayor demanda".

Ante eso, las tasas de interés nominales también aumentarían y ante la pérdida de certidumbre, "es probable que la demanda por el dólar se recomponga", dicen desde el CEB.

Por otra parte, los analistas de Banco Río, explican que "el fuerte crecimiento anual de la circulación monetaria en poder del público (+25% hacia fines de enero) y el inédito nivel de tasas de interés nominales (sólo 3% anual por depósitos a 30 días) aún constituyen estímulos muy significativos al gasto agregado de la economía".

Esta situación, sumada a las condiciones de oferta productiva que recién ahora están dando muestras de recuperación moderada, "muy probablemente sigan presionando al alza a los precios internos".

Un capítulo aparte merecen para los Cabrera y Park (Banco Río) el aumento de los precios "regulados o semi-administrados" como taxis, cigarrillos y medicina prepaga que en enero cumplieron un papel importante en la determinación de la inflación ya que explican el 0,3% del 1,5% de incremento observado.

Aunque aclaran que "el congelamiento de las tarifas de servicios públicos claramente presionan hacia abajo la variación de precios del total de precios regulados".

A su juicio, "con la inflación anual por encima de 7% y en alza, es natural que algunos servicios decidan ajustes de precios relativamente grandes cada vez más frecuentemente, en vez de aumentos pequeños en base mensual". En la práctica, ello revela una incipiente e informal indexación de contratos en la economía, tal como también sugiere la aceleración en la inflación en alquileres (+2.8% interanual en enero de 2005, frente a sólo 0,4% en junio de 2004).


Lo que se hizo
La política monetaria implementada por el BCRA, caracterizada por una actitud intervencionista en el mercado de cambio a través de la compra de dólares, le permitió a la entidad recomponer reservas hasta llegar a los 20 mil millones de dólares a fines del mes pasado.

Según datos del CEB, este nivel de reservas consiguió incrementar el saldo en 144% desde el piso evidenciado en enero de 2003.

"Esto le otorga a la entidad una mayor tranquilidad y respaldo para efectuar política monetaria", explican los analistas del CEB.

Pero más allá de la recomposición del stock de reservas, el BCRA adoptó otro paquete de medidas que pueden resumirse en: mantenimiento de las tasas de interés en los niveles más bajos (incluso menores que en la convertibilidad). Para esto "desarrolló un mercado de pases con la intención de generar una tasa de interés de referencia cuyo manejo permita el ajuste de las diferentes tasas de mercado a la determinada por la entidad", explica el CEB.

También desde este centro de estudios apuntan un dato significativo en enero como fue "la aceleración en el otorgamiento de créditos". Mientras este segmento creció a una tasa de cambio interanual del 11,9% en 2004, lo hizo al 31,8% durante enero pasado.

Explican este fenómeno por "la adopción de políticas redistributivas como el incremento del salario mínimo y las jubilaciones y la liberación de efectivo de los bancos a través de la reducción en los niveles de encajes exigidos por el BCRA".


Un camino distinto
Por otra parte, explican que el BCRA diseñó el año pasado diferentes alternativas para controlar el nivel de crecimiento de la base monetaria y continuar con la acumulación de reservas. En este sentido, el principal camino fueron las licitaciones para cancelar redescuentos que las diferentes entidades financieras pidieron al Central durante la crisis.

Así "el BCRA consiguió instrumentar un nuevo mecanismo para efectuar su absorción de circulante, reducir la base monetaria y conseguir mantener la Banda Monetaria Amplia entre las bandas prefijadas.

Pero el contexto que se avecina este año difiere de lo ocurrido en 2004. Con los incrementos salariales que se generalizarán a la mayoría de los sectores de la economía, los analistas estiman que la autoridad monetaria deberá manejar nuevos instrumentos para poder contener la inflación, porque una masiva intervención en el mercado cambiario puede atentar contra el cumplimiento de la programación monetaria.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo

InfografíaInfografías
Las variables monetarias

Notas Relacionadas
Lascano: expansión menor y alerta por los precios

Espert: ortodoxia fiscal o control de capitales


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados