Un chico de 15 años confesó ser autor de un ataque a machetazos

Se llama Rodrigo y está preso por atacar a un carpintero. Le provocó serias lesiones en una pierna y en una mano

El pibe se llama Rodrigo, tiene 15 años y le dicen Gordo. Un grupo de vecinos de Sánchez de Bustamante y Pavón, muy cerca de su casa, estuvo a punto de lincharlo cuando lo descubrió robando una bicicleta que un hombre mayor había dejado sobre la vereda. Lo retuvieron, lo entregaron a la policía y horas después, cuando estaba en la seccional 11ª ya con su madre al lado, terminó por reconocer que había sido el agresor del carpintero Daniel Gregorio Reynoso, al que de un machetazo le provocó una fractura expuesta en la pierna izquierda y la casi amputación de un dedo de la mano el jueves pasado.

Quizás sin saber que Reynoso era su vecino, el adolescente se fue de boca y terminó siendo víctima de su propia brabuconada. El comentario de que él había sido el autor de la descomunal agresión comenzó a correr de boca en boca y llegó donde tenía que llegar: la policía. Por eso cuando el pibe marchó preso por otro intento de robo ocurrido el viernes a la mañana y la policía confirmó su nombre, el círculo comenzó a cerrarse.


Por una bicicleta
Rodrigo, cuya identidad no se divulga por razones legales, cayó preso a las 10.45 del viernes. Según fuentes policiales, el pibe fue descubierto por unos vecinos cuando intentaba robar la bicicleta que un hombre de 74 años había dejado en la puerta de un negocio de Sánchez de Bustamante y Pavón. El menor fue sujetado por un grupo de vecinos de la cuadra que incluso llegaron a golpearlo, de acuerdo a la versión brindada por la policía.

La situación, de acuerdo a esa historia, no pasó a mayores por la intervención de un agente de la Patrulla Urbana de la Unidad Regional II franco de servicio que pasaba por el lugar y decidió intervenir. El chico presentaba algunos magullones y tenía la ropa rota por el forcejeo. Minutos después, el Gordo estaba en la seccional 11ª, donde también tuvo que comparecer su madre.

"En la investigación por el ataque a Reynoso ya manejábamos la versión de que no sería ajeno un pibe llamado Rodrigo que es de la zona, donde ocurrió el hecho. Por eso cuando lo interrogamos junto a la madre sobre ese asunto, terminó confesando", consignó un vocero de la seccional 11ª. "Lo único que aclaró fue que no usó un machete sino un cuchillo", añadió. Según trascendió ayer, el pibe vive en la zona de Grandoli y Esteban de Luca, a dos cuadras de donde fue atacado Reynoso.

Daniel Reynoso, de 48 años, sufrió una agresión descomunal el jueves a la madrugada cuando volvía a su casa luego de una reunión con unos amigos. El carpintero caminaba por Castro Barros y Olegario Víctor Andrade cuando un joven delincuente lo golpeó para robarle la billetera. Según contaron sus hijos Vanesa y Cristian, Reynoso se negó a entregar sus pertenencias e intentó defenderse, pero el agresor sacó un machete que llevaba escondido entre sus ropas y le aplicó un golpe en la pierna izquierda. "Era un pibe de entre 16 y 18 años", explicó Vanesa Reynoso. Después le apuntó a la cara, pero Daniel alcanzó a desviar el machetazo con una mano.

El hombre quedó tirado en la calle, a dos cuadra de la casa, gravemente herido. El primer machetazo le había fracturado la tibia entre entre la rodilla y el tobillo, y el segundo por poco no le apuntó el dedo mayor de la mano izquierda. Reynoso fue socorrido por los vecinos y continúa restableciéndose de las lesiones en el Sanatorio Rosendo García.

Daniel Reynoso continúa internado.