Quiñones anunció que su familia visitará La Habana en mayo

Su esposa e hijos se encontrarán con Hilda Molina, pero el profesional cubano permanecerá en Argentina

El médico cubano Roberto Quiñones decidió que su esposa y sus dos hijos viajen a La Habana durante la primera semana de mayo para reunirse con su madre, Hilda Molina, ante la negativa del gobierno de Cuba de otorgarle el permiso de salida de la isla.

Así lo anunció ayer durante una conferencia de prensa que convocó Quiñones y en la cual además presentó a su nuevo asesor jurídico, el ex jefe de Gabinete de la Cancillería, Eduardo Valdés. El ex funcionario justamente fue uno de los que debió renunciar al empantanarse las negociaciones entre Cuba y Argentina por el pedido de la científica cubana Molina para viajar al país a visitar a su hijo.

Valdés ratificó ayer que continuarán las gestiones para insistir con el pedido para que Molina y su madre, Hilda Morejón, salgan de Cuba, y enfatizó que "sin el gobierno argentino, no será posible el reencuentro de la familia", al aludir a las gestiones "públicas y más reservadas" sobre el caso.

Quiñones señaló que hasta el lunes por la noche tenía decidido acompañar a su familia en el viaje, pero que lo disuadió el pedido de su abuela desde La Habana para que permanezca en el Argentina (ver aparte).

Por esa razón se definió que se trasladará el resto de su familia para estar en Cuba entre el 2 y el 9 de mayo cuando cumplen años Hilda Molina y el hijo menor del médico.

"Tal vez este viaje sirva para descomprimir, para descongelar el tema", confió el médico cubano para explicar la decisión de permanecer en Buenos Aires cuando viajen su esposa, Verónica Scarpatti, y sus dos hijos.

Valdés, en cambio, se mostró más optimista sobre el impacto de la decisión de programar el viaje de la familia de Quiñones, ya que cree que puede generar "un gesto de reciprocidad" por parte del gobierno cubano.

Por ser argentinos, tanto Scarpatti como sus hijos, Roberto Carlos y Juan Pablo, deben tener una visa de ingreso a Cuba y la mujer consideró que "no habrá problemas ya que es el gobierno de Fidel Castro el que invita", pero dijo que pedirá "garantías del Poder Ejecutivo argentino, de que no nos pasará nada".


Esperan salida política
En la conferencia de prensa convocada por Quiñones en la clínica de rehabilitación que dirige en el barrio porteño de Caballito, el médico estuvo acompañado por su esposa y por Valdés, quien anunció la incorporación a su equipo de la ex subsecretaria de Derechos Humanos de la Cancillería Alicia Oliveira y el ex senador Hipólito Solari Yrigoyen.

Valdés destacó que no descartan avanzar en medidas "jurídicas", aunque puntualizó que en la primera etapa se avanzará en las "gestiones de buena voluntad".

"Creemos que se puede resolver desde lo político", señaló Valdés y mencionó como ejemplo la posición del gobierno español que influyó ante la Unión Europea para no avalar el embargo a la isla.

Con ese antecedente, los asesores de Quiñones evalúan la posibilidad de pedir una reunión con el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, cuando llegue a la Argentina, en dos semanas.

De todos modos, Quiñones marcó que su posición es que se vea su reclamo "como un caso humanitario" y que insistirá con las gestiones para que se produzca la autorización de salida de su madre y abuela de La Habana.

"Mi madre no quiere venir en carácter de asilada política, con una salida sin retorno. Mi madre no es anticastrista, no es una amenaza en lo científico ni en lo político", agregó el médico.

Quiñones y Valdés confían en hallar una salida política que permita el reencuentro.