| domingo, 09 de enero de 2005 | La cantante cuenta cómo fue volver a rodar un filme Barbra Streisand: "Detesto las entrevistas" La actriz es la madre de Ben Stiller en "Los Fockers-La familia de mi esposo", que se estrena el jueves Martín González Oliva Después de superar aquellas pequeñas diferencias con sus suegro (Robert De Niro), parece que todo va viento en popa para Greg (Ben Stiller) y su prometida. Sin embargo, todavía queda una cosa por hacer: presentar a los padres de ambos. Los hiper-relajados Fockers (Dustin Hoffman y Barbra Streisand) tendrán que entender a los estirados y herméticos Byrnes (De Niro y Blythe Danner), pero todos los esfuerzos parecen ser en vano porque estas dos familias no se entienden. "Los Fockers-La familia de mi esposo", que se estrena el próximo jueves en Argentina, es la saga inevitable de la exitosa "La familia de mi novia", pero también significó el regreso al cine de la cantante y actriz Barbra Streisand.
Hace exactamente ocho años que no se la veía en la pantalla grande, desde que dirigió y protagonizó "El espejo tiene dos caras", película que hizo cinco años después de su filme anterior. Es que como ella misma lo admite, Streisand ya demostró su talento tanto en el cine como en la música muchos años atrás, y ahora le llegó el momento de descansar. Por eso su presencia en "La familia de mi esposo", como la señora Focker, fue toda una sorpresa. En la ficción hace de madre de Ben Stiller, el encantador enfermero, un personaje clave en la comedia y proclive a los accidentes, que protagonizó situaciones tremendamente difíciles cuando se empeñaba en el primer filme en visitar la casa en la que había crecido su novia Pam Byrnes (Teri Polo), con el fin de conocer a sus padres.
-¿Cómo y quién definió a tu personaje?
-Creo que yo tuve mucho que ver en la cuestión. Lo primero que pensé es que si iba a hacer de la madre de Ben, tenía que tener rulos, porque el tiene rulos en "La familia de mi novia". Yo quería parecerme a él. Y luego pensé en mi nieta de seis años, que tiene el cabello largo y enrulado. Después me puse a pensar que este matrimonio parece haberse quedado estancado en la década del setenta. Y enseguida empecé a vestirme como si fuera la señora Focker. Después que terminamos la película me quedé mirando el póster y me di cuenta que esa imagen me resultaba muy familiar. Luego de un rato me di cuenta que así era como lucía yo en "Nace una estrella". Pero nunca tomé conciencia de eso hasta que terminamos de filmar.
-¿La relación con tu propio hijo es tan buena como la que se da en la película con el personaje de Ben?
-La ficción es la ficción, pero lo real es que a mi hijo le está yendo muy bien. Es un artista increíble. Hizo varias películas y una fue exhibida en Sundance. Es muy talentoso. Escribe música pero lo más impresionante son sus dibujos. El se convirtió en un maravilloso artista a los quince años y ahora diseñó un set de tarjetas increíbles que podrían formar parte de un libro o algo así. Jason dibujó un cuadro maravilloso de un hombre con una lágrima, como si fuera de Picasso.
-Jay Roach (el director del filme) dijo que la escena del masaje con Robert De Niro fue la que te convenció de que tenías que hacer esta película...
-Si, eso fue lo que yo le dije. Es que no había contacto físico en el guión que yo leí un año atrás. Ningún contacto entre mi personaje y el de Bob De Niro. Por lo tanto sugerí que le hiciera un masaje insinuante, como para que hubiera interacción entre los dos. Y entonces escribieron la escena del masaje. Yo me preparé la noche anterior con mi propia masajista. Hicimos toda una coreografía para la escena, para que la pudieramos repetir una y otra vez. Pero también tuve que ver videos de terapistas sexuales para prepararme para este papel, y me resultaron muy divertidos. A mí me parece muy interesante que en la ficción mi personaje y el de Dustin Hoffman tengan una relación tan intensa, tan tarde en la vida y después de tantos años.
-¿Te molesta la edad?
-Soy la primera en sorprenderme al ver mi fecha de nacimiento (24 de septiembre del 42) y comprobar que ya cumplí 61 años. Es cierto que los años se llevan por dentro y, entonces, podría decir que tengo apenas 30 años.
-Todo parece indicar que en la vida nunca perdió el tiempo. ¿Trabajaste desde muy chica?
-Estudié en el Erasmus Hall School, pero fui muy mala estudiante, ya que desde muy niña quería ser artista. Lo primero que hice fue trabajar en varios clubes nocturnos de Brooklyn cantando y como animadora, ya que hablar frente al público siempre fue algo sencillo para mí. Grabé un disco que sólo lo oyeron mis amigos y los que los compraban en los clubes donde trabajaba, creo que por curiosidad, porque entonces yo no era nadie.
En 2003 Barbra Streisand cumplió 40 años de carrera discográfica. Grabó 58 álbumes y obtuvo 16 premios Grammy, cifra que aún no pudo lograr ninguna cantante de su estilo.
-Hace tiempo que no aparecías en una película. ¿A qué dedicas tu tiempo?
-La estoy pasando muy bien haciendo cosas que no tienen que ser evaluadas. Me encanta cuidar mi jardín y hasta he creado una variedad de rosa que lleva mi nombre y que ganó un premio a la mejor fragancia. Tiene varios colores y es muy hermosa. En cualquier caso, la estoy pasando muy bien quedándome en casa, compartiendo mi tiempo con la gente que amo y construyendo una casa. Construir una casa es una experiencia muy creativa. No sólo la estoy pasando bien, sino que no extraño el trabajo para nada. Cuando uno tiene una vida feliz no necesita buscar la felicidad en otro sitio, no hace falta sublimar y crear una película o un disco. En cierto modo, me resisto a trabajar porque me volví demasiado cómoda.
-¿Te arrepentís de haber filmado alguna película?
-Jamás renunciaría a ninguna de mis películas. Amo a todas con la misma pasión, auqnue mi preferia es "Yentl", porque se la dediqué a mi padre que murió cuando yo era una niña.
-¿Sos capaz de definirte?
-Soy una actriz que canta. Tengo un carácter fuerte, intransigente, lo que me ha causado serios problemas con los directores, empresarios, y hasta con mis compañeros. Pero cuando se me pasa, voy a cada uno de ellos y les pido disculpas. Soy tan excesivamente perfeccionista con mi trabajo, que me dejo arrastrar por el temperamento. Al final resulta muy desagradable y me crea mala fama
-¿Te importa lo que diga la prensa de vos?
-Ya no me importa lo que digan de mí. Detesto hablar de mí, aunque haya artículos que me hayan llamado egocéntrica. Detesto las entrevistas. Te preguntan cosas sobre tu vida y luego cuando respondes te llaman egocéntrica. Y si haces una película y eres la protagonista, suelen criticarte con más dureza porque eres mujer. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Streisand flanqueda por Dustin Hoffman y Robert De Niro. | | |