Detenidos tras la masacre de 28 hondureños

Tres personas fueron detenidas por la masacre de 28 pasajeros, entre ellos siete niños, que fueron atacados a balazos cuando viajaban en un ómnibus por Chamelecón, 225 kilómetros al noroeste de Tegucigalpa.

El presidente de Honduras, Ricardo Maduro, identificó a los atacantes como delincuentes y desestimó que pertenecieran a una organización política. "No es un grupo que se dedica a ese objetivo (guerrilla), sino más bien un grupo de delincuentes que está perdiendo la guerra y decide retarnos", dijo Maduro.

El mandatario movilizó más de 1.500 policías y militares a Chamelecón y montaron operativos en las salidas de ambas ciudades para evitar la fuga de los delincuentes.

La policía detuvo a un miembro de la "Mara Salvatrucha", una de las bandas criminales más activas del país, quien confesó haber participado de la matanza. Además, se apresó a dos de sus cómplices en una localidad vecina.

El micro con 50 pasajeros cubría en la noche del jueves la ruta entre Chamelecón y San Pedro Sula cuando fue interceptado por otro vehículo, desde donde abrieron fuego con fusiles de asalto AK47 contra los pasajeros.

En el ataque murieron 28 personas y 17 fueron heridas. La mayoría de los pasajeros del ómnibus eran obreros que se dirigían a sus hogares.

Los atacantes se habían identificado como Movimiento Popular de Liberación Cinchonero, a través de unos panfletos dejados en el ómnibus. Ese grupo se disolvió a principios en los años 90. (Télam)