Fortuna. Calculan que el patrimonio del victoriense José Alberto Reggiardo, fallecido en 1998, superaba los U$S 30 millones

Procesan a tres personas por querer adueñarse de una fabulosa herencia

Una docente de Nogoyá fue acusada junto a un abogado y un escribano de utilizar documentos falsos

Victoria.- La Cámara de Apelaciones de Concepción del Uruguay confirmó el procesamiento de la docente María Angélica Godoy, el abogado Walter Martínez y el escribano Luis Miguel Galli, dictado en mayo último por la titular interina del Juzgado de Instrucción Nº 2 de Gualeguaychú, María Angélica Pivas, en el marco de la causa por la herencia del estanciero victoriense José Alberto Antonio Reggiardo, fallecido en julio de 1998.

Godoy de 29 años y oriunda de Nogoyá -quien afirmaba ser hija del millonario- fue acusada por los delitos de falsedad ideológica de instrumento público agravado y uso de documento público falso, estafa procesal y defraudación. También fueron procesados Galli, de 73 años, domiciliado en Gualeguaychú -quien hace años fue condenado por la Cámara del Crimen de Gualeguay por falsificación de instrumento público- y Martínez de 47 años de Nogoyá, quien había sido procesado por Pivas como partícipe necesario de esos delitos, y ahora la Cámara lo consideró coautor de los mismos.

La jueza Pivas entendió que la docente, asistida por el abogado y el escribano, se valió de una partida de nacimiento supuestamente apócrifa -falsedad ideológica de instrumento público- para disponer transitoriamente de los bienes de Reggiardo, lo que la llevó a declararse como heredera -estafa procesal- para lograr la venta de cosas ajenas declaradas como propias -defraudación-. Además, la titular del juzgado de Gualeguaychú cuenta con un estudio de ADN que demuestra que Godoy no era hija de Reggiardo y tendría la confirmación de que la docente, invocándose como heredera, vendió campos de Reggiardo por un valor de 670 mil dólares.

Pivas habría frustrado una maniobra de la defensa de Godoy que consistió en la presentación de un trámite de pasaporte hecho por Reggiardo en la Policía Federal en Buenos Aires, en el que habría dejado constancia de que la docente era su hija. Pero tras un secuestro de la División Legajos de la Federal se habría demostrado que jamás existieron datos completados por el hacendado. En la causa son denunciantes Luisa Etelvina Arrúa -concubina de Reggiardo- y Mario Aníbal Calderón, quien según los análisis de ADN es hijo del estanciero.


Antecedentes
El excéntrico Reggiardo, considerado como uno de los hombres más ricos de Entre Ríos ya que su fortuna se calculaba en más de 30 millones de dólares, era soltero y tenía 73 años cuando murió en un accidente aéreo el 1º de julio de 1998 al caer el helicóptero Bell 47-GA4 que piloteaba en su estancia de Colonia Celina, departamento Paraná. Reggiardo vivió desde 1972 con Arrúa, primero en el hotel Nizza de la ciudad de Santa Fe y luego en la estancia San Carlos de Victoria.

El millonario también era propietario de la estancia El Cerro, en Colonia Celina, a unos 50 kilómetros de Paraná -precisamente donde sucedió el accidente- y de numerosos campos en varias provincias. Se sabe que tuvo acciones en la curtiembre Meiners de Esperanza -una de las más grandes del país-, en la metalúrgica Acindar y participó del negocio gasífero en Speling antes de la privatización de Gas del Estado. Hay quienes afirman que estuvo ligado a una fábrica de armas en Brasil con Héctor "Pájaro" Villalong, conocido traficante internacional con participación en la Guerra del Golfo.

Además de Arrúa -que acusó a Godoy, Martínez y Galli por la tramitación de un acta de nacimiento apócrifa-, apareció en escena como querellante Calderón, quien hoy tiene unos 50 años, patrocinado por el abogado Ricardo Solari. Su madre, que trabajó para Reggiardo, perdió la vida en 1954 cuando se hundió la lancha Victoria Regia en la que viajaba por el Paraná con su entonces pequeño hijo, quien se salvó de milagro. Cuando se conoció la noticia de la muerte del hacendado, una mujer -amiga de la madre- ubicó a Calderón que vivía en Posadas y le confesó quién era su padre, lo cual fue corroborado por un estudio de ADN que arrojó un resultado de un 99,9% de compatibilidad. En medio de la lucha por la fortuna, surgió en Nogoyá la joven Godoy, quien dijo ser de apellido Reggiardo, e hija del millonario.

Los abogados Martínez de Nogoyá y Diego Firpo de Victoria presentaron un testimonio de nacimiento en el Juzgado de 1ª Instancia Civil y Comercial victoriense. Allí expusieron que María Angélica "Reggiardo" era hija del hacendado y de Ramona Hilda Godoy y que nació en Nogoyá el 9 de enero de 1975. A ello sumaron el testimonio del escribano Galli, quien dijo que seis meses antes de morir, José Reggiardo había llegado a su estudio junto a la muchacha, para decirle que ella era su hija. Galli no pudo mostrar papeles, adujo que se quemaron en un accidente de tránsito.

Con todo ello, el juez Del Valle emitió una declaratoria de herederos a favor de María Reggiardo, aunque luego el Servicio de Genética del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos demostró que no era hija del millonario, ya que resultó negativo el estudio de ADN que se hizo de una muestra de sangre que se extrajo contra su voluntad y por la fuerza en el hospital de Nogoyá.

El excéntrico José Reggiardo era dueño de una fortuna.