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 miércoles, 22 de diciembre de 2004  
Una firma local compró Construfé y concluirá la torre a medio hacer
No se dieron más detalles respecto del resto del predio. El proyecto original preveía cuatro edificios de 20 pisos

Pablo R. Procopio / La Capital

Pasaron dos décadas. El complejo de viviendas Construfé, que comenzó a construirse en los 80, fue rematado finalmente ayer. La transacción se realizó por valor de 4.505.000 pesos, 25 minutos después de iniciada la subasta en la Asociación de Martilleros (Entre Ríos al 200). "La empresa que represento lo compró para embellecer la ciudad", dijo a La Capital el apoderado de la compañía El Jardín SRL, Angel Ghirardi. La intención de la firma es, en principio, terminar la única torre de hormigón que ya está erigida en el lugar, y la obra comenzaría a principios del año próximo.

"Eso era un palomar que afeaba Rosario", sostuvo el abogado, quien durante el proceso de remate se destacó por subir las ofertas en 5 mil pesos permanentemente. "Póngale cinco", decía.

La subasta (prevista para las 16.30) se inició a las 16.40 con una base de 2.415.000 pesos. Apenas habían pasado los primeros 20 minutos ese valor se incrementó en más de un millón de pesos.

A esa altura, la compulsa por quedarse con el terreno y sus inmuebles plantados se debatía entre Ghirardi y un "desarrollador inmobiliario" que no quiso identificarse (ver aparte).

Ocho inversores pujaron por comprar a través del remate judicial el terreno y los esqueletos de hormigón de Construfé, el complejo de viviendas de Mendoza y Ayacucho que quedó trunco en 1989 cuando muchos rosarinos ya habían adquirido sus departamentos.

Sin embargo, en la sala de la asociación había alrededor de 70 personas presenciando la subasta, ya que los responsables de cada uno de los ocho sobres presentados llevaron su respectiva comitiva de asesores.

"La ciudad merece tener otra cosa en ese lugar", indicó Ghirardi respecto del codiciado terreno donde comenzó a levantarse el complejo. Una exquisita zona donde hay edificios de alta categoría y ya no quedan terrenos para realizar este tipo de emprendimientos.

Las frases del apoderado de la firma El Jardín siguieron luego, aunque sin demasiados detalles. "La empresa a la que represento la va a hacer", dijo un tanto misterioso.

-¿Qué va a hacer?

-Por ahora se va a terminar lo que hay y después se verá.

-¿A qué se refiere?

-Al único edificio construido.

-¿Para cuándo?

-Para cuando se pueda, pero ya se inicia a principios del año que viene.

Ghirardi remarcó que "por el momento" no hay otra idea sobre el proyecto. "Todavía no se sabe", agregó antes de confesar: "No pensábamos que se iba a subastar por esta cantidad, creíamos que iba a ser menos".

En el lugar se realizará una construcción destinada a viviendas tratando de "jerarquizar lo más que se pueda la estructura", que se levantó pensada en ser estándar o de clase media.

El abogado, ex funcionario y empresario agrícola, calificó a la firma que adquirió el predio como "una empresa comercial" integrada por unos cinco socios, "todos rosarinos".

-¿Siempre estuvieron interesados en este proyecto?

-No, pero la idea surgió a partir de terminar con un lugar que era una afrenta para la ciudad.

En rigor, si bien la compañía realizó emprendimientos similares nunca fueron "de esta magnitud", añadió Ghirardi, quien consideró que fue el remate "más importante de los últimos tiempos", y recordó que no pudo efectivizarse en dos oportunidades. Aunque el juez en lo Civil y Comercial Rodolfo Bruch ya intentó vender el inmueble a través de una licitación y de un remate, hasta ahora nunca había conseguido compradores.

Pero esta vez la situación fue distinta. "Hubo ocho ofertas y eso supera todas las expectativas", dijo en su momento a este diario el martillero Marcelo Poliotti, el encargado de conducir la subasta.

Y ayer, apenas terminó, volvió a hablar. Estaba exultante, si se tiene en cuenta que su comisión alcanza el 3 por ciento del monto de la venta, es decir algo más de 135 mil pesos.

El remate "superó lo que pensaba", expresó, para confesar que creía que "no iba a ascender a más de cuatro millones". En este sentido, consideró como "récord" a la cantidad final pagada por un terreno "de este tipo, que no tiene comparación en Rosario".

La empresa compradora tomará posesión del inmueble a partir de febrero próximo, luego de la feria de enero.

Construfé fue imaginado como un complejo de viviendas de cuatro torres de 20 pisos cada una. Además, tendría cocheras y locales comerciales. Estaría enclavado en una zona exclusiva de la ciudad, donde hoy el metro cuadrado cuesta alrededor de 500 dólares. Comenzó a construirse a mediados de los años 80 pero quedó trunco cuando la inflación se convirtió en híper, en los días finales del gobierno de Raúl Alfonsín.

Esa circunstancia parece invertirse dos décadas después. La tarde de ayer fue el escenario de los primeros pasos de reactivación de un lugar emblemático. En principio, como marca la ley, después de que se bajó el martillo se entregó el 10 por ciento de la subasta.
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El apoderado de la empresa, Angel Ghirardi, dijo que el proyecto trunco se había convertido en "una afrenta" para la ciudad.

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