Doce desocupados de Fighiera inauguraron su propia fábrica

Por el programa Manos a la Obra instalaron una panificadora y elaboradora de dulces y galletitas

Fighiera. - Hasta hace unos días eran parte del preocupante índice de la desocupación argentina, hoy se convirtieron en dueños de su propio destino y comenzaron a ver la vida de una manera distinta. Son doce beneficiarios del programa Jefes y Jefas de Hogar que en el marco del Manos a la Obra lograron emprender su propia panificadora y fábrica de dulces y galletitas, que denominaron "Sabores de mi tierra".

La inauguración fue una verdadera fiesta. El coqueto local de los flamantes empresarios rebosó de alegría y augurios de éxitos y el pueblo de Fighiera no se quiso perder la vuelta al trabajo, a la dignidad de sus convecinos y, de paso, saborear las exquisiteces que elaboran.

"En realidad estos proyectos fueron aprobados en mayo pasado, pero recién ahora pudimos ponerlo en marcha porque debimos esperar el envío de los fondos, comprar los materiales y acondicionar el local, conectar el gas y concretar los trámites bromatológicos. Por todo ello debemos agradecer la gran ayuda de la comuna", explicaron las trabajadoras mientras el público vaciaba las bandejas de masas recién elaboradas.

En total recibieron casi 30 mil pesos en subsidios del gobierno nacional. Con esa suma compraron las maquinarias para la línea de producción: sobadora, amasadora, horno, churrera, termoselladora, cocina industrial, freidora y grisinera; balanzas, heladeras y exhibidoras. También los uniformes para las trabajadoras.

"Por el momento sólo está funcionando la fábrica de galletitas, después pondremos en marcha la panificadora y fábrica de dulces", adelantaron y aclararon que el local fue acondicionado por la comuna, que además tomará a su cargo el alquiler durante dos años, "para favorecer la sustentabilidad del proyecto".

Antes del corte de cintas y la bendición sacerdotal, el jefe comunal Carlos Mariani afirmó que "nada de esto es casual, es el resultado lógico de un proyecto, de una política clara y firme que hemos encarado desde el primer minuto de nuestra gestión: la recuperación de la cultura del trabajo como eje fundamental para el desarrollo de Fighiera".

"Quiero reconocer el apoyo que recibimos de parte de las autoridades nacionales y provinciales que, lejos de poner obstáculos a nuestras iniciativas por ser de un color político diferente, nos allanaron el camino cumpliendo con altura y compromiso el cargo para el que fueron designados, sin anteponer intereses partidarios o personales", dijo Mariani.

El orgullo de hacer sus propios productos.