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 martes, 14 de diciembre de 2004  
En mal estado. Fue el viernes pasado en un salón de Mendoza al 4200 y aún no se conocen las causas de la afección
Un cumpleaños de 15 terminó con al menos 30 invitados intoxicados
Cuatro de los comensales tuvieron que ser internados con cuadros de diarrea, vómitos y deshidratación

Carla Rizzotto / La Capital

Todavía no se determinó si fueron los sandwiches, los crepes o el pollo relleno. Lo cierto es que al menos 30 personas se intoxicaron el viernes pasado en un cumpleaños de 15 que se festejó en un salón ubicado en Mendoza al 4200. Cuatro de los invitados tuvieron que ser internados con cuadros de vómitos, diarrea y deshidratación, producto de algún alimento del menú que estaba en mal estado. Mientras en la confitería no se explican "qué pudo haber pasado", el Instituto del Alimento está realizando las investigaciones necesarias para establecer las causas de intoxicación.

Hacía un año que Florencia había contratado el salón para festejar sus 15 años, y el viernes pasado llegó ese día. A las 21.30, unos 127 invitados se encontraron en Mirage (Mendoza 4227) para celebrar el cumpleaños de la adolescente. Primero vinieron los sandwiches, después los crepes de jamón y queso y los de verdura, le siguió el pollo relleno con jamón y queso, el helado y la torta. Se sirvió jugo de frutas para los menores y vino con soda para los adultos.

El festejo pasó sin sobresaltos y a las 4 Florencia terminó de despedir a sus invitados. El problema llegó un día después, cuando al menos 30 de ellos empezaron a sentir dolores de estómago y a tener vómitos y diarrea. "Los padres de muchos chicos, y hasta algunos de mis familiares, me llamaron el sábado para decirme que estaban descompuestos. Tengo conocimiento de que cuatro fueron internados, pero ya están bien", contó Cecilia Almada, madre de la cumpleañera.

Belén, de 11 años, es una de las comensales que debió hospitalizarse un día después de haber ido a la fiesta. La adolescente llegó el sábado al Sanatorio de Niños no sólo con un cuadro de intoxicación, sino con un traumatismo de cráneo sufrido luego de caer desmayada por una lipotimia, provocada por la deshidratación.

El gerente general del sanatorio, Javier Escalante, informó ayer a este diario que los resultados de los estudios neurológicos dieron normales y que la paciente ya está ingiriendo pequeñas dosis de alimentos. El médico sostuvo además que entre hoy y mañana Belén, quien se encuentra internada en una habitación, será dada de alta.

Otro de los intoxicados se encuentra hospitalizado en Buenos Aires porque sufrió una descompensación después de presenciar anteayer el partido entre Independiente y Newell's, que se jugó en Avellaneda.


"Shockeados"
"Estamos shockeados por lo que pasó. Ahora los únicos que me interesan son los chicos", expresó Almada, quien hizo la denuncia en la comisaría 6ª. Según detalló el comisario principal Oscar Rendo hasta ayer había en total nueve denuncias, por lo que comenzaron a realizarse las investigaciones correspondientes.

"Fuimos al lugar y constatamos que el salón es higiénico. Por el momento no hay sospechas de que se hayan transgredido las normas de bioseguridad", aseguró Rendo, quien agregó que faltan realizar las averiguaciones en la empresa de catering que se encarga de servir a los comensales de Mirage.

Se trata de una empresa de Granadero Baigorria que trabaja con el salón de fiestas desde hace 11 años. Es más, según admitió a La Capital el propio dueño de la confitería, Gustavo Mattioni, tiene una "confianza plena" en el cocinero y los dos ayudantes que desde la tardecita se instalan en Mirage para preparar los menúes que se servirán en el salón.

"Es la primera vez que tenemos problemas. No sabemos qué pasó. Realmente me sorprende porque Manuel Hurtado (de la empresa de catering) no es un improvisado", dijo ayer Mattioni, quien remarcó que "los mozos siempre se llevan comida de sobra y ellos están todos bien".

Hurtado prestó ayer declaración ante las autoridades policiales y, según pudo saberse, afirmó que se cumplió con las normas correspondientes en la elaboración de los alimentos, y fundamentalmente que en ningún momento se cortó la cadena de frío.

De hecho, no todos los invitados a la fiesta terminaron descompuestos. Apenas se notificó de lo sucedido, el Instituto Municipal del Alimento tomó cartas en el asunto e inició una serie de investigaciones.

Antes de entrar en detalles, el director del instituto que se encarga de inspeccionar las cuestiones bromatológicas de los comercios de la ciudad, Luis Baita, advirtió que el menú contenía alimentos de "alto riesgo".

Para dar un ejemplo de esto, el especialista precisó que "el proceso de cocción de cincuenta pollos no es igual al de una hamburguesa. Hay que garantizar que supere los 70 grados y que la manipulación del fiambre sea la correcta". No obstante, aclaró que "todo depende de las condiciones en las que se preparan las comidas".

Baita sostuvo que hace un mes se realizó una auditoría en el salón de fiestas Mirage y que las condiciones higiénicas del lugar eran aceptables. "Claro que esto tampoco garantiza nada porque el problema podría estar en el proceso de producción del menú", indicó.

Las investigaciones continúan para determinar los motivos de la intoxicación y qué pena le cabe a los responsables. Desde el Juzgado Correccional Nº 7 se ordenó seguir investigando, pero aún no se dispuso ninguna medida de clausura.
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El cumpleaños de 15 se realizó el viernes pasado en Mirage.

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