| sábado, 11 de diciembre de 2004 | Un comisario presentó su pedido de retiro por hostigamiento periodístico El director de Personal de la policía cordobesa dijo que la prensa lo persigue por el crimen de un panadero Córdoba.- El director General de Personal de la Policía de Córdoba, comisario mayor Aldo José Vergara, pidió su pase a retiro al aducir que se siente abrumado por el "hostigamiento" periodístico que sufre a raíz de haber estado mencionado en la causa judicial por un homicidio cometido años atrás, por el que nunca fue procesado aunque si sospechado.
En una nota elevada al jefe de policía de Córdoba, comisario general Jorge Rodríguez, Vergara fundamentó su petición de retiro por "los hostigamientos mediáticos suscitados en la investigación judicial de la triste muerte del panadero Héctor Corradini", ocurrida en 1998.
Corradini era un panadero que estaba vinculado con la cooperadora de uno de las seccionales de la ciudad mediterránea, quien fue ejecutado a balazos años atrás. Por ese homicidio, Vergara estuvo dos veces vinculado a la causa, aunque nunca hubo evidencias suficientes como para mantenerlo detenido.
En este caso, el pasado 24 de noviembre fue detenido en Rosario el comerciante Domingo Antonio Romano, quien según los investigadores estaba vinculado a la banda que secuestró y asesinó a Corradini en 1998. Sin embargo, días después, los familiares del panadero asesinado no lo reconocieron en la rueda de personas que se hizo días después de su arresto en la Jefatura cordobesa.
"Con desidia y sin fundamentos se me inculpa sistemáticamente en hechos delictivos que de modo alguno he cometido. En consecuencia y, por estos motivos, derivan a que tome esta dura decisión", dijo el jefe policial en su pedido de retiro.
Y añadió: "En mi existencia me han tocado situaciones difíciles de manejar y decisiones costosas de emprender, pero ninguna se asemeja a la presente, puesto que he dedicado una vida de servicio a la comunidad, como así también al desarrollo y mejoramiento de nuestra querida Policía provincial", remarcó Vergara.
El homicidio del panadero, ocurrido en noviembre de 1998, alcanzó notoriedad a partir de que la víctima, además del comercio que tenía era titular de la cooperadora de la seccional 36, en la que se habrían producido serias irregularidades que Corradini se aprestaba a denunciar.
Esa fue siempre la hipótesis que manejó la familia del panadero, que la noche del 16 de noviembre de 1998 fue llevado desde su domicilio por dos o tres personas a bordo de su propio auto con destino incierto. También, aseguraron los familiares, los delincuentes serían conocidos de Corradini. Horas más tarde, el panadero apareció muerto a unas 20 cuadras de su casa. Tenía las manos esposadas, tres balazos en la cabeza y aún estaba en el interior de su vehículo. (Télam) enviar nota por e-mail | | |