El funcionario criticó la nula inversión en el área que hay en Santa Fe

Sylvestre Begnis: "La capital provincial ni siquiera tiene una Secretaría de Salud"

Isolda Baraldi / La Capital

El rosarino Juan Héctor Sylvestre Begnis desembarcó esta semana en su ciudad como flamante ministro de Salud provincial. Sin medias tintas, admitió que Rosario sufre una gran desigualdad en materia sanitaria respecto de la capital santafesina y otras grandes localidades. "La ciudad de Santa Fe ni siquiera tiene una Secretaría de Salud en su estructura. Todos los conflictos en ese área recaen sobre el ministerio, lo que bloquea la implementación de políticas descentralizadas. Es difícil plantear en la capital la necesidad de que tengan su propia área, pero vamos a tratar de revertirlo", remarcó. Además, prometió trabajar para que se implemente la educación sexual en las escuelas e invitó al conjunto de la sociedad a debatir sobre la despenalización del aborto. El funcionario también aseveró que trabajar con el municipio "es una obligación", y reconoció que el sistema sanitario rosarino absorbe demanda de toda la provincia, Córdoba y el norte de Buenos Aires.

-Rosario es la única Municipalidad de la provincia que tiene sistema propio de salud con alto presupuesto, lo que genera una gran asimetría con el resto de las ciudades. ¿Cómo trabajará en ese sentido?

-Un poquito de presupuesto tienen casi todas las localidades de la provincia, menos la ciudad de Santa Fe. Rosario sí tiene una gran parte de su presupuesto involucrado en el área y la provincia también destina una gran parte del presupuesto a Rosario. La coordinación de trabajo con la Secretaría municipal es una obligación nuestra, si no este error lo pagan los habitantes de Rosario, ya que es una ciudad que drena demandas de toda Santa Fe, además de Córdoba y el norte de Buenos Aires. Existe una gran desigualdad entre Rosario y el resto de las grandes ciudades, en particular con la ciudad de Santa Fe que ni siquiera tiene una Secretaría de Salud en su estructura, así los conflictos que hay en ese área caen directamente sobre el ministerio. Esto es una de las cuestiones que el gobernador Jorge Obeid me planteó que tratáramos de revertir. Es difícil plantearle a la ciudad capital la necesidad de que tenga su propia secretaría y que le permita al ministerio dedicarse a las grandes políticas. En Rosario vamos a apostar fuerte a la coordinación, sobre todo en la atención primaria de salud.

-¿Cuáles son los proyectos más destacados que ejecutará?

-Se van a realizar remodelaciones en los hospitales, inversiones en equipamiento e incluso está proyectado la construcción de otro hospital provincial en Rosario. Pero todo esto no lo inventé yo, sino que se acordó durante la anterior gestión.

-¿Se construirá un edificio nuevo para reemplazar al actual Hospital Provincial o funcionarán los dos?

-Habrá que ver, efectivamente es un nuevo alojamiento para el Hospital Provincial, después se verá cómo se ejecuta. Por ejemplo, cuando se construyó el Garraham en Buenos Aires era para cerrar el Gutiérrez; pero la gente del Gutiérrez lo mantuvo y los dos están trabajando. No sé qué destino se le dará a la vieja estructura. También habrá recursos extra para mejorar los dispensarios rosarinos.

-¿Cuál es el peor problema de salud que advierte en la ciudad?

-La falta de participación de la gente y la desinformación. No podemos ir a apagarle el pucho a alguien o evitar que coma en exceso. Tenemos la obligación de alertar sobre los riesgos que esas conductas implican y para eso hay que informar seriamente con un lenguaje accesible.

-¿Cómo se hace?

-Enseñando educación sexual en las escuelas, realizando campañas de promoción continuas y efectivas contra el tabaquismo u otras adicciones y planteando la necesidad de que la población se realice análisis de HIV.

-La provincia tiene una rémora importante en la implementación de educación sexual en las escuelas. Recién el año pasado se aprobó la ley de procreación responsable cuando Rosario cuenta con una normativa desde hace más de diez años.

-Sí, uno puede decir que es un rémora condenable, pero también tiene que ver con algunas fuertes figuras que afortunadamente han desaparecido y con ellas la gran influencia que tenían sobre la gente, fundamentalmente en la ciudad de Santa Fe... (en alusión al ex arzobispo Edgardo Storni). Es fundamental la implementación de las leyes de procreación responsable para evitar la incidencia monstruosa de embarazos adolescentes y también no deseados.

-En ese contexto el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, planteó la necesidad de abrir un debate sobre la despenalización del aborto. ¿Usted qué opina?

-Lo mismo que lo que expresa el ministro, que por otra parte es una visión federal del problema. Hay provincias y ciudades que tienen desde hace diez años una ley de procreación responsable y durante años la Nación miraba al sudeste. Es decir, es un tema al que no hay que eludirle el cuerpo, tiene que discutirse en toda la sociedad. Hay proyectos de leyes en las legislaturas provincial y nacional, ese es un ámbito vital. Pero creemos que también se debe debatir en las universidades, en las organizaciones no gubernamentales, en los sindicatos. Hay que tomar conciencia de la gravedad de la mortalidad materna por lo abortos realizados en malas condiciones sanitarias. Este debate está instalado, se va a saldar poco a poco y tiene que ser un tema consensuado socialmente.

-¿Trabajará con la cartera educativa sobre el tema de educación sexual?

-Sí, vamos a hablar con la ministra Carola Nin. Las cosas hay que hacerlas de a poco y en los sitios donde existe predisposición, de otro modo se provoca una reacción contraria.

El misnistro de Salud, Juan Sylvestre Begnis.