Deseo incumplido. Ramona Alvarez Domínguez no concretó su sueño de donar las viviendas al hogar de ancianos de San Lorenzo

Procesan a una pareja que se habría quedado con casas de una anciana

La mujer, que murió en 2002, era analfabeta y sorda, condición que fue aprovechada por sus inquilinos

Marcelo Abram / La Capital

San Lorenzo.- El Juzgado de Instrucción Nº 12 de San Lorenzo a cargo de Eduardo Fillocco procesó por defraudación a Estela Vachieri y Juan Carlos Paulone, la pareja que, a través de una maniobra perpetrada en la confección de una escritura, de inquilinos pasaron a ser propietarios de las viviendas de una anciana, analfabeta y con una gravísima hipoacusia llamada Ramona Alvarez Domínguez, quien junto a su esposo había testado sus viviendas a favor del Hogar de Ancianos local, hecho que nunca se concretó ya que las casas pasaron a ser propiedad del matrimonio ahora procesado.

"Ramonita", como era conocida en San Lorenzo, murió al igual que su esposo, Antonio Trivisono, sin poder ver hecho realidad su deseo de que las viviendas quedaran en poder de la institución de bien público.

La supuesta fraudulenta venta ocurrió después del fallecimiento de Trivisono y fue descubierta en forma casual por Ramonita, quien recurrió a la Justicia para que se declarara nula la transferencia al matrimonio Paulone.

Cuando promediaba la tramitación de la causa civil en septiembre de 2002, el Juzgado de Instrucción comenzó paralelamente la investigación de la posible comisión de los delitos de estafa y falsificación de instrumento público, producidos en el acto de venta de las propiedades de Ramona a sus inquilinos que además eran sus apoderados.

Ahora parece que el círculo de la Justicia sanlorencina comienza a cerrarse sobre los Paulone, ya que por un lado, en el marco de la causa civil que se encuentra en su etapa de alegatos, hace poco se rechazó un pedido de nulidad de los acusados, y por el otro el juez Fillocco procesó por defraudación a los Paulone de acuerdo al Código Penal, que establece que "el que defraudare, haciendo suscribir con engaño algún documento será reprimido con prisión de un mes a seis años".

En el marco de la instrucción de esta causa se produjeron numerosos testimonios, pericias contables, tasaciones inmobiliarias y constataciones ambientales.


La voluntad de Ramonita
Ramona y su esposo Antonio suscribieron en 1994 un testamento de sus propiedades a favor del Hogar de Ancianos Los Abuelos de San Lorenzo. Allí y con el consentimiento de sus parientes el matrimonio dejaba a la institución tres casas y dos departamentos en calle Riccheri al 300 frente al Hospital de San Lorenzo que ocupan casi un cuarto de manzana.

Ramonita enviudó en 1996 y por sugerencia del titular de la inmobiliaria que administraba sus propiedades nombró como apoderados a sus vecinos e inquilinos, Juan Carlos Paulone y su esposa Estela Vachieri.

Este hecho fue supuestamente aprovechado por el matrimonio para que la mujer les transfiriera las viviendas. La certificación de la venta se realizó en una escribanía de la ciudad a la que Ramona después denunció que fue llevada engañada, y en el acto se aseguró por parte de los "compradores" que el pago se había realizado unos días antes de celebrarse la escritura.

Como la supuesta venta se realizó con beneficio de usufructo, los alquileres de las propiedades los seguía cobrando Ramona hasta su muerte. Pero la llegada de un impuesto inmobiliario a nombre de Paulone alertó a la mujer, quien decidió hacer la denuncia.


Testimonios
Durante la etapa de instrucción de la causa penal la Justicia tomó declaración a varios familiares de Ramona, todos los cuales ratificaron el deseo de la mujer de no vender las propiedades, y dejarlas para el Hogar de Ancianos.

Por otra parte se ordenó una exhaustiva tasación de las propiedades que ocupan 1.874 metros cuadrados, y que según los Paulone habrían adquirido en 52.000 pesos. Los estudios determinaron que a noviembre de 1996, época en donde se realizó la cuestionada escritura, en tiempos en que un peso equivalía a un dólar, las propiedades tenían un valor de 176.000 dólares, y en la actualidad tienen un precio estimado en más de 390.000 pesos. Además se realizó una pericia contable que determinó que nunca se pudo justificar la procedencia de los fondos que permitieron que los inquilinos pasaran a ser propietarios de la noche a la mañana.

En su momento el matrimonio acusado informó que vendió un rodado y las llaves de un kiosco que funciona en una de las propiedades de Ramonita en $ 30.000, sin embargo el testimonio de la persona que alquila la propiedad y actualmente es dueña del negocio indica que se lo compró en $ 20.000 al hombre a quien los Paulone se lo habían vendido. Esto significa que en la transacción, este comerciante habría perdido $ 10.000, algo que resulta inverosímil.

Además se incorporaron al expediente penal los resultados de las audiometrías que se le hicieron en vida a Ramonita, que al igual que el testimonio de sus familiares ratifica los problemas auditivos que acarreaba la mujer, y la última medida tomada por la Justicia civil, que rechazó un pedido de nulidad de todo lo actuado realizado por la defensa del matrimonio procesado.

La tramitación de ambas causas es seguida de cerca por la representación legal del Hogar de Ancianos Los Abuelos que pertenece a la provincia franciscana de San Miguel con asiento en Rosario.

La cinco viviendas fueron transferidas a una pareja de inquilinos.