El fuelle de José Libertella dejó de sonar para siempre en París

Cumpliendo casi un designio de leyenda para un tanguero de ley como él, el bandoneonista José Libertella, líder y mentor del Sexteto Mayor, murió hoy a los 71 años en París, una de las ciudades del mundo que se rindió ante el estilo con que el artista interpretó la música de Buenos Aires.

El director, compositor y arreglador se hallaba en la Ciudad Luz participando en la serie de espectáculos "Tango Pasión" junto a un numeroso elenco argentino, pero su salud le jugó una mala pasada y en la tarde parisina, mientras paseaba, comenzó a sentirse mal y un paro cardíaco interrumpió su existencia.

El destino quiso que la vida de Libertella se apagara en una de las urbes donde se dimensionó su condición de notable embajador del tango y donde el 28 de noviembre pasado había clausurado al frente del Sexteto Mayor la gira europea 2004 sobre las tablas del prestigioso teatro de Champs Elysées.

El instrumentista, nacido en Calvera, provincia italiana de Potenza, el 9 de julio de 1933, ostentó una sólida ligazón con la escena internacional, donde tuvo presencia en más de 700 ciudades.

Con el Sexteto Mayor construyeron una síntesis con piezas propias y logradas recreaciones que se expresaron en "Orgullo criollo", "Canaro en París", "Adiós Nonino", "Payadora", "Recuerdo", "Silbando" y "Trenzas".

Los familiares del creador tramitan en estas horas la posibilidad de que los restos de Libertella sean trasladados a la Argentina por obra de sus compañeros de elenco, y por ese motivo ninguno de ellos viajará a Francia a encarar tal gestión. (Télam)