Sociedad: Palabras en acción

Marcela Isaías / La Capital

Desde el nacimiento de la palabra que luego se escribe en forma de ficción o poesía, y que luego va a parar a un libro (o no) hay un trayecto muy largo y complejo, un proceso creativo de progresivas transformaciones de esa materia prima. Los textos que surgen de este proceso van cambiando de estados y de nombres", reflexiona la escritora argentina Laura Devetach acerca de cómo se va transformando la palabra en su oficio literario.

Quizás y sin la pretensión de escribir un libro, muchas actividades que nacen desde el aula terminan luego en producciones expresivas colectivas. En este tren de encuentro entre palabras, textos y autores se inscriben iniciativas donde es, justamente, la palabra la que se vuelve protagonista.

Hace poco el llamado "Congresito de la lengua", realizado en la Isla de los Inventos, reunió a cientos de niños y niñas a jugar, crear y darle nuevas formas a los textos. El hecho no pasó inadvertido y derivó en diálogos y debates sobre cómo mirar los espacios de circulación de libros y letras en el ámbito escolar.

Sin quedarse atrás, seis escuelas de Villa Gobernador Gálvez, convocadas por el Colegio Nuestra Señora del Sagrado Corazón, tomaron la decisión e hicieron de la palabra una fiesta.

"Lo mejor fue encontrarnos, que vengan chicos de otros colegios"; "me encantó venir aquí, a esta escuela y conocer otros chicos", fue la conclusión casi unánime de Rodrigo, Sebastián, Macarena, Aleley y Florencia, todos alumnos de las escuelas congregadas que hablaron en representación del resto de sus compañeros.

Y sí, el encuentro en un espacio como el escolar genera un intercambio indispensable para enriquecer la palabra. Por eso, la invitación a elegir los vocablos más resonantes en el encuentro guardó esta dinámica de la colaboración mutua. Talleres, juegos, bailes, diálogos y hasta una caminata por el barrio fueron las actividades diseñadas para dar cuenta de lo realizado.

Antes habían sido invitados a opinar sobre las palabras: "Sirven para pensar, para hacer historias, para expresar nuestro cariño, para decir lo que sentimos", dijeron los casi 600 chicos pertenecientes a las escuelas Nº1.093, 8.168, 124, 1.425, 1.315 y 1.316.

No faltaron las expresiones más escolares y que sin poder desprenderse del sentido utilitario que suele otorgarle la enseñanza a las letras, dijeron: "Sirven para aprender y hacer oraciones".

Para llegar a esta instancia de reunión y juego, hubo mucho trabajo previo. La idea nació en el departamento de lengua del Colegio Sagrado Corazón. "Pensamos en sumarnos al Congreso Internacional de la Lengua Española que se hacía en Rosario con nuestra propia actividad, pero también en un espacio lúdico y de aprendizaje compartido", comentó la profesora de lengua Susana Rodríguez.

El "Congresito" de Villa Gobernador Gálvez sentó a los maestros como espectadores. Además de las docentes y directivos de distintas instituciones, estaban el supervisor regional Miguel Angel Aguilar, y las directivas del Sagrado Corazón, Celia Carrasco, Marta García y María Nélida Pepa.

En el encuentro una gran pancarta de construcción colectiva se encargó de reunir las palabras más votadas en esa jornada y, como diría Laura Devetach, también transformarlas, esta vez en una frase: "Si fuéramos conscientes usaríamos estas palabras como acciones para construir un mundo de paz, trabajo, solidaridad y amor".