A Raldes se le complica cuando tiene que marcar a grandotes

La mala actuación que cumplió Ronald Raldes contra Instituto no echa por tierras sus condiciones de buen defensor. Pero vaya coincidencia, cada vez que el boliviano se vio superado por delanteros rivales fue cuando tuvo que marcar a atacantes de buen porte, como ocurrió anoche con Daniel Jiménez en el Gigante de Arroyito. Es que esto mismo ya le había pasado cuando el equipo de Zof jugó contra Olimpo en Bahía Blanca. En aquel partido, a Raldes le tocó lidiar con la más fea: anular al grandote Delorte, quien fue el autor del gol de la victoria. Uno de los hombres más adelantados de los aurinegros no sólo lo complicó durante todo el partido sino que le ocasionó problemas cada vez que la pelota viajaba por el aire, un calco de lo que sufrió con Miliki. Otro antecedente ocurrió en Brasil, cuando el boliviano le hizo hombre en zona durante un buen tiempo a Luiz Fabiano. Aunque esa noche en el Morumbí su floja tarea pasó más desapercibida porque el trabajo sucio lo realizó el Oveja Talamonti.