Central Córdoba volvió a perder

Rodolfo Paraody / La Capital

El discurso se repite cuando se pierde toda expectativa y se transita la recta final: que se busca delinear el equipo para el próximo torneo, que el resultado es lo de menos, que existen síntomas saludables para lo que viene. Central Córdoba cayó en esas obviedades, que alimentan la esperanza de que todo puede cambiar. Pero antes que el tiempo certifique si se marcha por el camino correcto, es posible orejear lo que se tiene. Y la derrota de ayer contra Almirante Brown 3 a 2, por la penúltima fecha del Apertura de Primera B dejó poco para rescatar. Tuvo rendimientos individuales bajos, rara vez encontró la pelota y cuando la tuvo no supo que hacer. La salvedad que le cabe es que presentó algunos pibes y que el entrenador Domizi por ahora ensaya. Tiene ese handicap.

La primera gran falla charrúa pasó por la falta de recuperación en el medio, con volantes que parecían estáticos y perdidos ante el toqueteo de Gamarra, Aragón y Calabria, que se tiraba unos metros atrás para juntarse con sus compañeros. Fue precisamente el hijo del otrora árbitro que se metió entre los centrales y capitalizó un pase de Ferreyra para batir al debutante Santili, en otra muestra que los defensores tampoco tenían una buena tarde.

El cabezazo abajo de Javier López luego del centro de Petrovelli puso el marcador igualado y develó que Almirante también titubeaba en su última línea. Claro que no se la exigió demasiado porque Central Córdoba no tenía claridad ni creación y adoleció de juego asociado.

Todo lo contrario de su rival, que volvió a desnivelar cuando Garcete le ganó la espalda a Yocco, la entregó a Ferreyra y fue a buscar la descarga de taco para enfrentar a Santili y convertir junto al primer palo.

La pretensión de Domizi fue conseguir mayor poderío ofensivo en el segundo tiempo y optó por jugar con tres atacantes. Sacó a Petrovelli y puso a Conocchiari. Tampoco sirvió. El inconveniente era manejarla con criterio y nadie supo cumplir esa función, al margen de algún intento del ingresado Paredes.

Central Córdoba estaba descompensado y quedaba al filo. Tanto que en una rápida contra combinaron Garcete y Ferreyra, y este último piso el área y la cruzó abajo.

El golpe de cabeza de Santos que achicó la cuenta sirvió para disfrazar lo ocurrido. Central Córdoba tuvo un desempeño deficiente y cayó sin objeciones. A Domizi le queda analizar qué le sirve de este partido para programar el futuro.

Walter Gómez se anticipa a Di Fulvio.