| miércoles, 10 de noviembre de 2004 | La vida del líder palestino "está en manos de Dios". Descartan la eutanasia Arafat tiene hemorragia cerebral y su estado es sumamente crítico Tras su muerte, será enterrado en la Mukata de Ramala. Habrá elecciones en 60 días para elegir sucesor París/Ramala. - La salud del líder palestino Yasser Arafat empeoró notablemente en las últimas horas y se encuentra en estado de "coma profundo" con una hemorragia cerebral, indicó el último parte médico emitido en París, según informó el ministro de Exteriores palestino, Nabil Shaath. Shaath señaló anoche que no se contempla la posibilidad de desconectar al líder palestino, de 75 años, del respirador artificial que lo mantiene con vida. "Nosotros los musulmanes no aceptamos la eutanasia", aclaró. Ni su familia ni los médicos han considerado esa posibilidad, agregó. Arafat "está vivo" y sus principales órganos vitales -como el corazón y los pulmones- "funcionan normalmente. Recibe apoyo vital como cualquier otro paciente en coma".
En cuanto a la sucesión, Shaath confirmó que, en caso de muerte de Arafat, el presidente del Parlamento, Rauhi Fatthu, asumirá la presidencia de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en forma interina, mientras se realizan los preparativos para las elecciones a celebrar dentro de un lapso de 60 días.
No hay envenenamiento Los médicos que lo atienden en el hospital militar Percy, cercano a París, negaron que haya sufrido un envenenamiento y también descartaron que padezca un tumor maligno o un cáncer, en palabras de Shaath. En algunos círculos palestinos se sospechaba que los servicios secretos israelíes podrían haber envenenado al líder palestino.
Pero los médicos que atienden a Arafat no han podido todavía establecer un diagnóstico preciso sobre el mal que padece el "rais" (presidente palestino). Como causas probables han mencionado su edad, "una vida difícil, los últimos tres años y medio encerrado en una pequeña oficina con poco aire fresco y mala higiene, cercado por los israelíes", explicó el ministro. Y agregó: "Los médicos consideran que estas circunstancias han llevado a una inflamación intestinal y estomacal y a una pérdida de células rojas en la sangre, lo cual generó una reacción en cadena que desembocó en el estado de coma actual". La vida de Arafat, quien está internado en ese nosocomio especializado en hematología desde el 29 de noviembre pasado, está ahora "en manos de Dios", finalizó Shaath.
En la misma línea de los anuncios hechos por el ministro en conferencia de prensa, la representante de los palestinos en Francia, Leila Shahid, afirmó: Arafat "está mal, pero sigue con vida".
El portavoz de la clínica militar de Percy, general Christian Estripeau, había informado en horas de la mañana en París que el estado de Arafat se había deteriorado considerablemente durante la última noche y que el pronóstico era "reservado". El estado de coma "se ha profundizado", agregó. De todas formas, el nosocomio aclaró oficialmente que Arafat no estaba muerto.
Horas antes de la conferencia de prensa en París, el secretario presidencial, Tayib Abdel Rajim, había anunciado desde Ramala que Arafat había sufrido el lunes una hemorragia cerebral y que los médicos intentaban controlarla. Rajim subrayó que el "rais" será enterrado en su cuartel general de la Mukata, Ramala, donde Arafat permaneció aislado en los últimos tres años, a raíz de un virtual estado de sitio instalado por Israel.
El lugar del entierro es un tema conflictivo, ya que Israel se negó a permitir que fuera enterrado en Jerusalén, cuya parte oriental los palestinos reclaman como capital de un futuro estado independiente. El funcionario palestino hizo un llamamiento a su pueblo para que esté "firme y unido ante los difíciles momentos" y que "actúe de manera ordenada" una vez que se anuncie de manera oficial los funerales.
Aunque no habló en ningún momento de la palabra "muerte" de Arafat, Rajim aseguró: "Si esa es la voluntad divina -y nosotros creemos en ello-, entonces todos los preparativos para el funeral se harán aquí, en la Mukata, el símbolo de la determinación mostrada por el presidente" ante el cerco israelí.
La delegación palestina que viajó ayer a París para confirmar personalmente el estado de salud de Arafat, se entrevistó ya con los médicos que lo atienden, y tiene previsto regresar hoy a Ramala para participar en una reunión con toda la cúpula palestina.
La delegación estaba conformada por el primer ministro palestino, Ahmed Qurei; el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Mahmud Abbas, Shaath y Fatthu.
Visita restringida Inicialmente, Suha, la mujer de Arafat, quien se encuentra acompañada por el sobrino de éste Nasser El Kidwa, había dicho que no permitiría que estos funcionarios vieran a su esposo, una facultad que le concede el derecho francés como cónyuge del enfermo. "Tienen que ver la gravedad de la conspiración", había dicho Suha el lunes en declaraciones a la televisión árabe Al Yazira. "Muchos de los pretendientes del trono están viajando a París para enterrarlo vivo", denunció, aunque luego pidió disculpas.
La cadena francesa LCI informó posteriormente que se les permitiría el acceso. Pero Shaath dijo ayer durante la conferencia de prensa que sólo Qurei había podido finalmente pasar a la unidad de cuidados intensivos donde está Arafat. El periódico con sede en Francia "International Herald Tribune" informó, citando una fuente sanitaria no identificada, que los doctores de Percy habían reportado a la oficina del presidente francés Jacques Chirac que el coma de Arafat "es técnicamente reversible". Pero aclararon: "Esto es improbable".
El presidente de EEUU, George W. Bush, llamó ayer por teléfono a su homólogo francés para informarse sobre el estado de salud del líder palestino. Un portavoz del palacio Elíseo no divulgó el contenido de la conversación entre Bush y Chirac. (DPA) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Palestinos encienden velas por su líder. | | |