Festejos empañados por el desempleo

Berlín. - Alemania conmemoró ayer el 15º aniversario de la caída del Muro de Berlín, con festejos empañados por una alta tasa de desempleo en la región oriental y el sentimiento generalizado de que el país no ha logrado reunificarse totalmente.

El presidente Horst Koehler recordó que el 9 de noviembre de 1989, el día que el régimen comunista de Alemania Oriental abrió las puertas del muro casi por accidente, abrió una botella de champán en medio de la euforia nacional que condujo al año siguiente a la reunificación del país."Los alemanes podemos estar orgullosos de lo que se logró entonces pacíficamente: libertad y democracia", dijo Koehler en una ceremonia celebrada en la antigua frontera entre Alemania Oriental y Occidental.

Por su parte, el canciller Gerhard Schroeder emitió un comunicado elogiando la fecha como "el día en que triunfó la libertad y la democracia", y elogió a los alemanes del este por derrocar al régimen comunista de manera pacífica.

En un sector preservado del muro, en la parte central de Berlín, el alcalde Klaus Wowereit depositó una ofrenda floral en homenaje a más de 200 alemanes que murieron intentando escapar a occidente durante los 28 años de existencia de la barrera.

Pero un ex activista que luchó por la democracia en Alemania Oriental expresó el sentimiento que anima a muchos de sus compatriotas, cuando dijo que "no se sentía feliz" debido al alto nivel de desempleo en la región. La tasa de desempleo en el este de Alemania es del 17,5%, más del doble que en el oeste. La decepción se refleja en las elecciones, donde alrededor del 20% vota de manera regular por el partido que ha sucedido a los comunistas como el abanderado de la izquierda. (AP)