 | lunes, 08 de noviembre de 2004 | Un aliento que intentó levantar a las chicas Como ocurrió en el primer día, el público otra vez respondió. La principal diferencia estuvo que se hizo sentir más y que se prendió en las canciones. Hasta hubo un sector que insultó a las alemanas, ante el rechazo o la indiferencia del resto, cuando controlaban el trámite y el resultado era favorable. La convocatoria fue la esperada y le dio otra vez colorido al Champions Trophy.
Si de repeticiones se trata, nuevamente Aymar tuvo el mayor aliento. Cada vez que Lucha intentaba quebrar la férrea defensa germana, recibía una ovación. Si hasta daba la sensación que todos esperaban que le llegara la bocha a ella para mantener intactas las esperanzas. Ya en la presentación de los planteles, tanto Aymar como Stepnik se ganaron los mayores aplausos. También lo tuvo todo el equipo, cuando antes del comienzo las jugadoras se unieron y gritaron el "Argentina carajo", ante la ovación de todo el estadio. No ocurrió lo mismo cuando las alemanas cumplieron el mismo rito y recibieron una sostenida silbatina.
El apoyo y los cantos tuvieron mayor fuerza en el primer tiempo, cuando la selección argentina ofrecía lo mejor. Después, en la segunda etapa, se fue apagando un poco, a medida que Las Leonas defeccionaban en su rendimiento. De todos modos, siempre hubo un impulso de alentar para revertir la actuación. No pudo ser. El conjunto de Vigil no pudo satisfacer a las expectativas de un público que sí respondió. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El acto de apertura tuvo el color de los grandes acontecimientos. | | |