Santa Cruz: Esquila de ovejas

Visita a un establecimiento ganadero patagónico a 60 kilómetros de El Calafate

La estancia Rincón, ubicada sobre el río Santa Cruz, a 60 kilómetros de El Calafate, es una buena alternativa para conocer un viejo establecimiento ganadero de la Patagonia y aprender cómo se esquilan ovejas y se acompañan arreos.

El casco de Rincón, sobre la margen norte del río, domina el paisaje de la estepa. Desde allí es fácil imaginar el asombro de los turistas foráneos al descubrir la inmensidad del territorio cercano al fin del mundo.

El edificio principal se levanta sobre una loma enfrentando la confluencia de las aguas de dos ríos: el Bote y el Santa Cruz. Y si el espectáculo natural sorprende por la belleza, también resulta extraño para los visitantes encontrar en un sitio tan apartado y silencioso un mobiliario de estilo, casi suntuoso.

La explicación llega desde el fondo de la historia, de los primeros años del siglo pasado, cuando las aristocráticas familias criollas traían desde Europa muebles y materiales como el mármol de Carrara para esas casonas que terminarían alojando extraños.

De aquellos tiempos son el galpón de esquila y los corrales, y también la máquina esquiladora. Si bien algunas de esas dependencias originales están recicladas, los trabajos fueron tan minuciosos que nada parece alterado.


Pulpería
Lo mismo ocurre con la antigua pulpería donde el gauchaje se reunía al atardecer a beber ginebra y con la "matera" en la que recalaban los arreos de paso donde ahora se aloja el personal de la estancia, los guías y los instructores turísticos. El edificio de la "matera", sobre las orillas del Santa Cruz, es el lugar en el que se recibe a los turistas y donde los guías cuentan la rica historia de los establecimientos ganaderos.

Allí informan sobre las costumbres propias de la zona, entre ellas el hábito de matear, con el propósito de que los extranjeros se integren a la rueda del mate, mientras que para los más remisos hay te y café, y siempre algún sólido sabroso.


Huerta de verduras
La huerta de la estancia Rincón es uno de los sitios que más interés despierta entre los viajeros. A pesar de lo árida de la estepa patagónica, con mucho esfuerzo y riego -aprovechando las aguas del río Santa Cruz- en los invernaderos se logran verduras y especies que enriquecen las comidas de los huéspedes.

Las caballerizas se conservan como en aquellos años. Hasta allí llegan muy temprano los grupos de jinetes que emprenderán alguna de las expediciones que se organizan en la estancia y que incluyen la provisión de botas y equipos de montar.

Para los que gustan de las expediciones en cuatriciclos hay cascos y pecheras de seguridad, binoculares para los que elijan el avistaje de aves, como cóndores, águilas, halcones y gaviotas, caiquenes, bandurrias y golondrinas. Los pescadores encontrarán en Rincón guías expertos en las modalidades spinning y fly casting.

Es común encontrar grandes árboles petrificados y restos fosilizados de ostras, crustáceos y caracoles marinos. Los guías organizan excursiones por los yacimientos y explican que el suelo arenoso y pedregoso es producto de la erosión de los glaciares, el agua y el viento.

Los interesados en obtener mayor información pueden contactarse con el e-mail: [email protected]