La decisión sorprendió a la militancia

El PJ santafesino no hará el promocionado acto por la unidad

El peronismo pensaba movilizar 15 mil personas

Jorge Sansó de la Madrid / La Capital

El PJ santafesino decidió no realizar el acto que había programado para conmemorar el Día del Militante, festejo con que se recuerda el retorno de Juan Perón al país el 17 de noviembre de 1973. La decisión adoptada por el consejo ejecutivo partidario que se reuniera el viernes en la ciudad de Santa Fe fue del todo sorpresiva. La organización del acto estaba en plena etapa de desarrollo y los encargados auguraban la movilización de unas 15 mil personas.

Ese era el sentimiento que reinaba en la sede partidaria anteayer al mediodía, cuando Norberto Nicotra abrió la reunión del consejo a cuyo término se había cambiado la hasta ese momento enorme manifestación por actos locales en cada departamental que se realizarán el próximo miércoles 17.

La concentración "de la unidad" -como se lo promocionó- no iba a realizarse ese día (se argumentó que los senadores iban a estar ocupados) sino el viernes 12. Sólo restaba definir un lugar amplio, y los organizadores analizaban hacerlo al aire libre en la plaza España (frente a la sede partidaria capitalina) o en el estadio de la UTN de Santa Fe.

El optimismo para semejante despliegue parecía tener una causa localizada: el incidente en el Ministerio de la Producción en el que el senador Carlos Reutemann resultara agredido por algunos empresarios damnificados por las inundación del Salado de 2003. No pocos dirigentes del PJ atribuyeron a esa controversia un ánimo enardecido en sus bases dispuestas a reivindicar a su partido y a su líder provincial, al que consideran agraviado.

El entusiasmo de los afiliados, en cambio, no alcanzó para que el acto finalmente quedara resuelto, como se preveía que iba a pasar el viernes en la reunión de la conducción partidaria, en la que se ultimarían los detalles finales y se formalizaría públicamente la convocatoria.

La decisión adoptada fue no hacerlo, y sin que mediaran explicaciones públicas formales. Los trascendidos terminaron hablando de cierto temor de la dirigencia oficialista provincial a la reacción de los medios de prensa frente al acto.

En rigor, el temor giró ante la posibilidad de que los medios interpretaran la concentración como un mero desagravio a Reutemann por el mal momento que pasara en el Ministerio de la Producción -hecho que tuvo amplia repercusión nacional- y desde ese lugar reinstalaran la polémica desatada en aquella mala jornada para el ex gobernador.

De ese modo no sólo se reactualizaría la controversia sino que se volvería a exponer al Lole a las críticas que pudieren sobrevenir a la realización del acto que, de modo inexorable, quedaría instalado frente a la sociedad como una mera respuesta a los inundados que increparon a Reutemann por su responsabilidad en la tragedia hídrica que inundó un tercio de la capital provincial y costó más de una veintena de vidas.

Fuentes confiables admitieron también a La Capital que la decisión final se adoptó después de auscultar el ánimo del senador Reutemann sobre el acto que, conforme el programa provisorio, lo habría tenido como principal figura rodeado por los referentes de los demás sectores que integran el universo del peronismo santafesino.

Aunque nadie lo afirma oficialmente, muchos de los más altos dirigentes interpretan que fue el propio Lole quien le bajó el dedo al acto del Día del Militante, razón por la que éste no se hará.

Reutemann le habría bajado el pulgar al acto en el que iba a ser orador.