| domingo, 07 de noviembre de 2004 | La izquierda tradicional busca renacer en las urnas De cara a las legislativas del 2005, Izquierda Unida y el PO alistan su estrategia para aumentar su caudal electoral Los partidos de izquierda enfrentan las legislativas del 2005 como una nueva posibilidad de conformar un frente que termine con la participación electoral testimonial y les permita acceder a la función pública.
En las presidenciales del 2003, el último intento de alianza de la izquierda que llevó a Patricia Walsh como candidata, obtuvo poco más de 300 mil votos y logró posicionarse como la séptima fuerza.
Los esfuerzos del frente se concentrarán en provincia de Buenos Aires, aun cuando la mejor performance en 2003 fue en Capital Federal, por estar allí las mejores posibilidades de crecimiento electoral y, a su vez, las mayores dificultades.
En Buenos Aires, el Movimiento de los Trabajadores Socialistas (MST) y el Partido Comunista (PC) logró ampliar el frente de Izquierda Unida (IU) con la incorporación de los socialistas y pretende extender estos acuerdos a los movimientos de desocupados y a toda expresión organizada de la "lucha popular". El eje de la campaña será la "redistribución de la riqueza", confirmó Patricio Echegaray, máximo dirigente del PC, quien reafirmó la perdurabilidad de IU como herramienta electoral.
En la misma línea de construcción se anotó Néstor Pitrola, del Polo Obrero (PO), para quien "no hay intermedios" en la construcción política de aquí a las elecciones del 2005. "Nuestra base es la crisis del PJ, sus divisiones internas y el repudio a las prácticas clientelistas", señaló el conductor de la pata piquetera del PO.
Los acuerdos internos del PO indican que Pitrola será el candidato en el campo bonaerense y que el histórico Jorge Altamira irá por una banca en Capital para reeditar la elección porteña del 99, que lo convirtió en legislador. enviar nota por e-mail | | |