La Construcción quintuplicó afiliados y la UOM los multiplicó por cuatro

Los gremios que pudieron salir del pozo

Son los sectores más dinámicos posdevaluación. Comercio sumó 6.000 trabajadores en 18 meses

Sandra Cicaré / La Capital

El número de afiliados a los gremios de la construcción, metalúrgico y comercio se multiplicó varias veces en el último año en Rosario. Este fenómeno que experimentaron los sindicatos ligados a los sectores más activos de la economía local y regional, da cuenta de crecimiento del empleo, aunque no siempre ligado a mejores condiciones laborales.

Los números son un reflejo claro de la situación. En la ciudad, los empleados afiliados a la Unión de Obreros de la Construcción de la República Argentina (Uocra) crecieron de 1.000 a 5.000 en el último año y medio, mientras que en la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) regional Rosario, el padrón registra 12 mil inscriptos al sindicato, contra alrededor de 3.000 de dieciocho meses atrás.

El gremio de empleados de comercio también creció significativamente en valores absolutos, pero el aumento fue menor en forma proporcional. Así, en casi un año y medio hay 6.000 nuevos empleos declarados en la ciudad y la tasa general de los mercantiles pasó de 28 mil a 34 mil trabajadores.

La industria metalúrgica y la de la construcción fueron emblemáticos ejemplos de gremios que perdieron afiliados durante la crisis económica que arrancó en el año 98 y se profundizó en 2001.

En el primer caso, las épocas de bonanza quizás se retrotraen mucho más en el tiempo, ya que el modelo económico imperante en los años 90 echó por tierra la actividad de las empresas del sector, que por efecto de la convertibilidad, dejaron de ser competitivas, tanto para el mercado interno como para el internacional.


El otro boom
"Rosario vivió una explosión en cuanto a afiliados y pasó de ser la quinta seccional a nivel nacional a ocupar el tercer puesto después de Capital Federal y Avellaneda", aseguraron fuentes del secretariado general de la UOM Rosario.

Así, sobre un padrón nacional de 180 mil afiliados, el gremio a nivel local concentra 12 mil y estiman que esto podría trepar a 13.500 si se tiene en cuenta que hay alrededor de 1.500 empleos informales o en negro. Los números locales de la otrora poderosa UOM son un reflejo de lo que ocurre a nivel nacional. Por caso, a principios de los 90 en todo el país este sindicato recaudaba aproximadamente 12,5 millones de pesos y en plena crisis estos ingresos bajaron a los 3,9 millones. "Por esta razón el sindicato tuvo que deshacerse de parte de su patrimonio y comenzaron los problemas con la obra social", explicaron desde el gremio.

Esto ocurrió porque de llegar a tener 500 mil afiliados en todo el país, en la peor etapa de la crisis este número se redujo a 100 mil. De la mano del repunte de las industrias proveedoras de bienes de capital para el complejo sojero también crecieron las seccionales de la UOM en los polos agroindustriales. Este fue el caso de Las Parejas (que concentra a Las Rosas y Montes de Oca), donde los afiliados a este sindicato pasaron de 500 o 600 en 2001 a 2.000 trabajadores agremiados, casi cuatro veces más que hace tres años.

"Esto también se explica por el crecimiento de las empresas, que pasaron de 40 a 100 en el rubro agroindustrial", señaló el secretario general de la UOM Las Parejas, Miguel Solís.

El mismo fenómeno está viviendo la UOM seccional Cañada de Gómez (que incluye a esa localidad, Armstrong, Torturas, Correa, San Jerónimo y Carcarañá). El secretario general del gremio, José Dickie, explicó que "en el año 2000 teníamos hasta 2000 afiliados. Después con las crisis nos quedamos con alrededor de 500 y ahora repuntamos y estamos entre los 1.100 y 1.200".

El dirigente explicó que esto obedece a la "creación de nuevos puestos de trabajo" y no al blanqueo de personal informal, que aunque existe no puede cuantificarse.


Comercio y construcción
Los edificios en obra son la postal rosarina más clásica de estos últimos meses. Según explicó el secretario general de la Uocra local, Oscar Astrada, "en la época de la crisis (2001) el gremio tenía unos 1.000 trabajadores afiliados y en este momento hay alrededor de 5.000".

Respecto al trabajo informal, Astrada explicó que "la mayoría de los trabajadores de la construcción cobran su sueldo con recibo" y explicó que en cambio que "el trabajo en negro se da en cuanto a la composición del salario, ya que muchos trabajadores acuerdan con el empleador cobrar por recibo determinada cantidad de horas y el resto es informal", agregó el dirigente quien estimó que a nivel nacional la Uocra tiene actualmente unos 300 mil afiliados directos.

También en el sector de empleados de comercio el número de afiliados al sindicato creció sustancialmente. Carlos Ghioldi, de la comisión directiva de la Asociación de Empleados de Comercio de Rosario explicó que "de un año a esta parte, la tasa general de mercantiles pasó de 28 mil trabajadores a 34 mil" y de este número unos 25 mil están sindicalizados.

"Rosario es una plaza de altísima sindicalización en este gremio", explicó. El dirigente sostuvo, por otra parte, que resulta "muy difícil mensurar la cantidad de trabajadores en negro, aunque estimó que esto se da mucho más en los pequeños y medianos comercios".

"Salvo algunos supermercados grandes que tienen pasantías truchas, las empresas de gran tamaño en general no se arriesgan con empleo en negro", aclaró el dirigente mercantil.

Construcción y metalúrgicos volvieron a crecer.