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 sábado, 06 de noviembre de 2004  
Sabaleros y canallas juegan en el Cementerio de los Elefantes desde las 19. Dirige Baldassi
Otra empresa difícil para Central
Los auriazules van a la casa de Colón por puntos muy complicados

Otra prueba para el Central de Don Angel. De las que más resultados le ha dado en lo que va del Apertura. Un partido complicado, muy complicado, y fuera de casa. Los antecedentes avalan esta sugerencia. Triunfo en Liniers sobre el líder Vélez y victoria en Avellaneda ante Racing. Festejos grandes, aunque en casa, frente a San Lorenzo y Boca. Está claro, los auriazules se especializan en los choques de predicciones complejas y se nublan contra los rivales supuestamente accesibles (empate con Huracán de Tres Arroyos y derrota ante Almagro).

Esta vez la cita es en el Cementerio de los Elefantes y con Colón, uno de los equipos de mejor juego y más inestables del torneo.

Los de Zof se transformaron en especialistas de este tipo de compromisos: esperar para tantear al rival, sacarle la pelota, jugar con las obligaciones localistas del equipo que está enfrente y usufructuar los espacios que todo lo anterior genera.

La cuestión es respetar el libreto a rajatabla para no rozar los límites. Entregarle la pelota a Colón requiere de un estado de concentración altísimo y de una batería de precauciones a la altura de las circunstancias.

Todo en su justa medida. Dejarlo venir al equipo de Basile puede ser letal, pero también beneficioso para hacer uso y abuso de los lugares libres que siempre dejan los equipos que atacan en todo momento.

Esa es una de las características sobresalientes de los sabaleros. Pero también hacen un culto del control del balón. Lo demostraron el sábado de la semana pasada en la extraordinaria jugada que derivó en el golazo de Pipa Estévez, el tercero rojinegro en el Fortín.

Los no: no esperar a Colón metido en el área, no cometer infracciones cerca del área, no descompensarse de la mitad de la cancha hacia atrás.

Los sí: usar los espacios en su justa medida, jugar el partido en el medio de la cancha, marcar escalonadamente a Giovanni Hernández.

Parámetros de un partido que tiene un favorito y un partenaire, aunque los calificativos no sean tan contundentes como parecen antes del pitazo inicial. Que propone de antemano un partido con la pelota más por el piso que por el aire. Pero Central sabe cómo modificar ese tipo de tendencias.
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El equipo de Zof necesitará de la seguridad de Raldes en defensa.

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