 | lunes, 25 de octubre de 2004 | Patricia Nine dijo que temía a la policía pero defendió el operativo "Tenía pánico, pero quería vivir para irme de ahí", admitió. Pensaba que saldría tras el pago del rescate Patricia Nine, rescatada anteayer por la policía en el partido bonaerense de Merlo tras 25 días de cautiverio, calificó de terrible la primera semana que pasó secuestrada y reveló que durante el tiempo que estuvo capturada pensó en cómo sobrevivir y soñó con la liberación.
La mujer defendió el operativo policial que la rescató a los tiros, pero no obstante confió que le temía a la policía y que pensó que su liberación iba a llegar tras el pago de un rescate y no por un asalto táctico a la casa donde la tenían secuestrada.
"Hoy vuelvo a creer en la policía", afirmó la mujer al defender el operativo en el que fue rescatada a los tiros de una casa donde la tenían secuestrada, aunque reveló que le tenía pánico a esta posibilidad.
Al hablar en su casa de Paso del Rey, Nine se emocionó y lloró cuando agradeció a Juan Carlos Blumberg por el apoyo que le dio a su familia, y también dio las gracias al presidente Néstor Kirchner, al ministro de Seguridad León Arslanian y a la policía.
Emocionada, también resaltó el apoyo que le dieron los vecinos y señaló que estas demostraciones le dieron fuerza durante el tiempo que estuvo secuestrada.
Ayer encabezó una marcha junto a centenares de familiares, vecinos y amigos hacia la catedral de Moreno donde se ofició una misa en agradecimiento a su liberación.
"Me cuidaron" En cuanto al trato que le dieron los captores, Patricia, también recordó a uno de los delincuentes que la custodiaba en la casa de Merlo por el trato humano que le dio. "Me cuidaron en la alimentación y en el estado psíquico y yo se lo agradecí a uno de ellos", detalló. La mujer se refirió al momento exacto en que la policía irrumpió en la casa de León Gallo al 900 de Merlo donde estaba cautiva, y calificó al suboficial Ricardo Aquino "como el sol, como ver a Dios", porque se trató del policía que la salvó cuando ella estaba "aterrada".
Rodeada de su marido y su padre, Nine afirmó que no esperaba la liberación para el sábado. Contó que vivió ese momento "como un sueño" y agradeció no sólo al policía Aquino (ver aparte) sino a todos los uniformados que participaron de los operativos para rescatarla.
La mujer contó que siempre estuvo cautiva en el mismo lugar y que se acostumbró al cautiverio a pesar de que al principio "fue todo un horror. La primera semana fue terrible", admitió.
También reveló que durante su cautiverio los secuestradores le compraron tres diarios, uno por fin de semana, y la dejaron oir la radio, por lo que tenía una leve noción de lo que ocurría afuera.
Comentó que al principio de su cautiverio pensó por su familia, y que luego para no sufrir, no se puso en el lugar de ellos, por temor a quedar destrozada. "Le busqué la vuelta para llegar entera. Quería sobrevivir para irme de ahí. Soñaba con mi liberación", contó.
En este sentido relató cómo fue vivir el Día de la Madre, en un lugar de cautiverio, y lejos de sus dos hijos. Explicó que esa fecha la pasó tratando de olvidar que se celebraba y que durante el tiempo que estuvo privada de la libertad pensó en que lo iba a festejar, el primer día de su liberación, lo que ocurrió ayer.
"El primer día de liberación es como el Día de la Madre multiplicado por 20. Yo los necesitaba (a sus familiares), fue muy fuerte el reencuentro", contó.
Patricia Nine afirmó en este sentido, que a partir de su liberación dedicará más tiempo a su familia. Dijo que su "base" son sus padres, sus abuelos y lo que tiene que construir (en referencia a sus hijas) y aceptó que de ahora en adelante, la familia tendrá que hacer un cambio.
También instó para que la policía haga prevención y se evite que exista una nueva víctima más de un secuestro extorsivo. (Télam) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Centenares de amigos, familiares y vecinos marcharon por Moreno junto a Patricia. | | |