 | lunes, 25 de octubre de 2004 | Entre ascensos y condecoraciones El sargento ayudante Ricardo Aquino fue el hombre clave en el rescate de Patricia Nine ya que cuando se registró el tiroteo donde se tomó la casa del cautiverio por asalto táctico, el policía cubrió a la mujer con su cuerpo y evitó que los captores la balearan.
El agente recibió un balazo en la espalda que no le provocó daños importantes, ya que impactó en su chaleco antibalas.
Fuentes de la policía de investigaciones dijeron que "seguramente, tanto Aquino, como los policías que participaron del rescate serán ascendidos y condecorados". Asimismo, las fuentes contaron que Aquino tuvo que ser trasladado a un centro asistencial de la zona, debido a que sufrió una fisura en el brazo tras la caída cuando protegió a Nine de los disparos.
El sargento ayudante fue el primero que ingresó a la casa ubicada en Gallo 918, de la localidad de Libertad, partido de Merlo, detrás de uno de los captores que estaba en la puerta y que buscó refugio cuando vio llegar a una docena de policías de civil.
Una vez en el pasillo de la casa, el captor comenzó a disparar y se inició un enfrentamiento que culminó dentro de la vivienda donde Patricia Nine estaba encadenada a una cama.
Al entrar a la habitación, Aquino observó donde estaba la mujer e inmediatamente se arrojó sobre su cuerpo para cubrirla de los disparos que los captores efectuaban contra la policía.
En ese momento, la policía mató a uno de los delincuentes y cuando su cómplice se disponía a cargar el arma fue advertido para que depusiera su actitud.
"No me voy a entregar, no me voy a entregar", repitió el captor ante los policías que lo mantenían apuntado, y tras cargar el arma se disparó un tiro en la cabeza, dijo un investigador que participó del operativo.
Ricardo Aquino (42 años) está casado, tiene tres hijos e integra la brigada antisecuestros de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de La Matanza. enviar nota por e-mail | | |