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 viernes, 10 de septiembre de 2004

Rusia criticó a Occidente por tener "dos pesos y dos medidas" ante el terrorismo

Moscú. - Rusia criticó con virulencia ayer a los países occidentales que dicen luchar contra el terrorismo pero ofrecen asilo a los separatistas chechenos, casi una semana después del sangriento desenlace de la toma de rehenes en Beslán, Osetia del Norte.

El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, no escatimó críticas a Estados Unidos y Gran Bretaña, dos países que han ofrecido asilo político a los emisarios del líder independentista y ex presidente checheno Aslan Masjadov. Los rusos, que han ofrecido una jugosa recompensa por la captura de Masjadov, lo equiparan a Osama Bin Laden, el jefe de la red terrorista Al Qaeda. "Es como si les pidiéramos a ustedes que negociaran con Bin Laden", graficó el gobierno ruso. Claro que, en el caso de Masjadov, existe una diferencia: ganó en 1997 unas elecciones limpias reconocidas por la comunidad internacional y siempre ha rechazado esta involucrado en atentados contra civiles. El paralelo con Bin Laden le cabe mucho más al líder militar checheno Shamil Basayev, autor desde 1995 de los peores y más cruentos atentados contra civiles.


Coalición antiterrorista
Lavrov, en declaraciones a la radio La Voz de Rusia y al diario Vremia Novostei, denunció la política de "dos pesos y dos medidas" de Washington y Londres. Subrayó que el asilo ofrecido a los emisarios de Masjadov "perjudica considerablemente la unidad de la coalición antiterrorista" internacional y denunció a los países cuyos dirigentes siguen marcados por los "viejos estereotipos de la guerra fría".

El ex presidente soviético Mijail Gorbachov también apoyó la línea de firmeza del actual mandatario Vladimir Putin. No puede sentarse a la "misma mesa que los matones y los criminales y sería un error" criticarlo. "El mundo entero debe permanecer unido para luchar contra el terror", zanjó.

El ministro del Interior, Rachid Nourgaliev, anunció, por su parte, las primeras medidas para reforzar la lucha antiterrorista en el Cáucaso Norte, región inestable que los secuestradores querían "incendiar", según el presidente ruso.

En el Cáucaso Norte, un mosaico de repúblicas que forman parte de la Federación Rusa, incluida Chechenia, se han establecido células de oficiales superiores del ministerio del Interior y del FSB (Servicio Federal de Seguridad) para coordinar las acciones de las fuerzas del orden y prevenir la amenaza del terrorismo y "eventuales intrusiones de las bandas armadas ilegales". Estas células tendrán una autoridad directa sobre las fuerzas del Interior, del FSB, del ejército y del Ministerio de Situaciones de Urgencia.

También se han enviado a las diferentes regiones refuerzos de las tropas especiales del Ministerio del Interior, los "Spetznaz", integrados por unos 70 hombres cada uno.

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