De republicano español a beato

El Papa Juan Pablo II presidió un acto, realizado en Loreto (Italia) de beatificación de tres integrantes de la Acción Católica que murieron en el siglo XX, frente a más de doscientas mil personas. Uno de los nuevos beatos es Pere Tarres Claret, un español del siglo XX que sirvió como médico en el bando republicano durante la Guerra Civil española y luego se hizo sacerdote. Los otros dos son italianos: uno es Alberto Marvelli, que murió en 1946 con 28 años, creció en una familia católica y empleó toda su vida adulta ayudando a los pobres, particularmente cuando su ciudad natal de Rimini fue devastada por las bombas aliadas durante la Segunda Guerra Mundial. Marvelli, compañero de escuela del director italiano de cine Federico Fellini, murió cuando un camión militar lo atropelló mientras montaba en bicicleta en Rimini. La otra beatificación fue para una mujer: Pina Suriano, siciliana que murió en 1950 después de dedicar la mayor parte de su vida a la oración.

La beatificación es el último paso antes de la santidad en la Iglesia Católica. Con la ceremonia del domingo, el Papa ha beatificado a 1.340 personas, más que todos sus predecesores. Además ha declarado a cerca de 500 santos durante su pontificado, que comenzó en 1978.