Alfonsín le advirtió a Kirchner que el país no es Santa Cruz

Crítico, el ex presidente recordó que el titular de la Casa Rosada "tiene fama de autoritario"

El ex presidente Raúl Alfonsín volvió a advertirle ayer al presidente Néstor Kirchner que "el país no es Santa Cruz" y consideró "espantosa", y la calificó como una "medida medieval", la elevación a 50 años de la pena por delitos sancionada recientemente por el Congreso nacional.

Asimismo, el dirigente radical reiteró sus críticas hacia la política social implementada por la administración de Kirchner y dijo no saber cuál es el rumbo económico del gobierno.

Respecto de la inseguridad, Alfonsín estimó que "es un tema gravísimo". Y advirtió que "el primer problema que hay en la gente es la desocupación y el segundo el aumento del salario". Pero el ex jefe del Estado también centró sus cuestionamientos en la titular del ARI, Elisa Carrió, al lamentar su posición de que "todos son malos y que se vayan todos".

"Eso se puede plantear para la televisión y para ganar, quizás, una elección, pero así no se cura a la sociedad; se la enferma más", arremetió el radical.

Luego sostuvo que Kirchner "tiene cosas positivas y negativas". Entre las primeras citó el rechazo a mandar tropas a Irak, el impulso al Mercosur, "la dignidad" con que negocia con el FMI, la renovación de la Corte Suprema y la política sanitaria.

Pero Alfonsín recordó que el presidente "tiene fama de autoritario" y le pidió "que entienda que el país no es Santa Cruz", donde -indicó- "se manejaban las cosas de manera muy uniforme, para buscar una palabra que no hiera a nadie". Por eso advirtió: "Acá no puede ser así".

El ex mandatario también comparó como un hecho negativo "la falta de diálogo con la política, que es muy grave" y le reprochó al patagónico hacer "un mal uso del gasto social".

En cuanto al diálogo político, le avisó que "él no debe elegir" a sus interlocutores y, en ese sentido, sostuvo que "tiene que invitar a todos los aquellos con representación parlamentaria".

Cuestionó, además, que se hayan entregado planes sociales a los piqueteros y, acerca de la protesta callejera, el ex presidente reiteró que "se debe aplicar la ley".

Sobre el aumento de las penas a 50 años, Alfonsín concluyó: "Me parece espantoso. Esa es una medida medieval que no la tiene ningún país del mundo".