| domingo, 22 de agosto de 2004 | EL CRIMEN DE RAUL TABARES Detienen al presunto homicida de un changarín Se refugiaba en la casa de un familiar. Tiene 23 años y sería el autor del disparo mortal. Sigue confuso el móvil Efectivos de la comisaria 15ª detuvieron ayer a un hombre de 23 años imputado por el homicidio de Raúl Luis Tabares, un changarín asesinado de un disparo en la cabeza el pasado miércoles en Balcarce al 4200. Fuentes policiales identificaron al detenido como Diego Daniel Fernández, de 23 años, quien junto a otro joven de 18 años, quien anoche era intensamente buscado por los uniformados, robaron el martes pasado en la vivienda de Mister Ross 2025. Como Tabares se resistió al atraco, lo ejecutaron con un disparo en la cabeza mientras lo tenían reducido en el piso. Hasta anoche los pesquisas no tenían muy claros los móviles del crimen y dudaban entre la consecuencia de un robo y una venganza.
Fernández fue detenido en la casa de un familiar, en Colegiales al 2600, no muy lejos del lugar donde perpetró el crimen. De acuerdo a fuentes de la investigación "este pibe sería quien mató a Tabares, según la mayoría de las testimoniales recogidas hasta el momento". Los uniformados están tras los pasos de Diego "Patón" Farías, de 18 años, cómplice del detenido.
Tabares, un changarín de 38 años que era conocido en el barrio como Gordo, se había mudado junto a su pareja a una humilde vivienda de Mister Ross al 2000 hace tres años. El robo que derivó en la muerte del hombre ocurrió pasada la medianoche del martes cuando el Tabares estaba junto a su pareja en la puerta de su vivienda. Dos jóvenes que caminaban "con sus noviecitas" tomaron por sorpresa a la víctima y lo redujeron en el piso. Uno de los muchachos entró a la vivienda y se llevó un televisor. Cuando el dueño de casa intentó forcejear con uno de los delincuentes, fue asesinado de un tiro en la cabeza. Acto seguido, se dieron a la fuga.
Robo o venganza Para la policía el caso está caratulado como homicidio en ocasión de robo, porque los delincuentes se llevaron un televisor de la vivienda, algo de dinero que la víctima tenía en un bolsillo y hasta un par de zapatillas.
Pero también asaltan a los investigadores algunas dudas ya que la víctima y el cómplice del presunto homicida, apodado en el barrio como Patón, ya se conocían.
Unos días antes del crimen, uno de los participantes del atraco, había asaltado a Tabares cuando iba en bicicleta por bulevar Oroño. Entonces, el ladrón se apoderó del rodado y se marchó. Tabares no se amilanó y fue en la búsqueda de su rodado. Increpó a la madre del delincuente para que se la devolvieran y regresó a su casa en la bicicleta. Así las cosas, el hecho del robo sería para desdibujar el verdadero motivo del crimen: una venganza. enviar nota por e-mail | | Fotos | | En esta casa de la zona sur vivía y encontró la muerte Raúl Tabares. | | |