Caso Aguirre: acusan a la policía de Entre Ríos

José Iparraguirre, el abogado defensor de Raúl Monzón, quien anteayer recuperó la libertad en la causa en que se investiga el secuestro de Fernanda Aguirre, no descartó que "un sector de la policía entrerriana haya incorporado a la adolescente al mercado de la prostitución infantil".

Iparraguirre, quien es el delegado local de la Liga por los Derechos del Hombre (LADH), afirmó que su convicción surge de datos que le proporcionó la Asociación de Meretrices de la República Argentina que, según el letrado "llegó a esa conclusión".

"En el tema de la trata de blancas hay mucha protección", dijo Iparraguirre e inmediatamente se preguntó "si Fernanda fue llevada a otra ciudad o provincia, ¿cómo puede ser que se salga con tanta facilidad teniendo la provincia de Entre Ríos numerosos controles policiales?".

Iparraguirre insistió en que "hay que apuntar la investigación hacia otro lado (no sólo hacia los Lencina) para poder avanzar seriamente".

En tanto, su defendido, Raúl Monzón, quien anteayer por la tarde recuperó la libertad por orden del juez federal subrogante Ramón Ferreira, reiteró su inocencia en el secuestro de la niña de 13 años Fernanda Aguirre.


Siguen buscando a "Hígado" Muñoz
El abogado de Cristian Hígado Muñoz, el hombre sospechado de liderar la banda que secuestró al adolescente Nicolás Garnil, aseguró ayer que su defendido es ajeno al hecho y señaló que la policía quiere "cercar" a su familia para obligarlo a entregarse a la Justicia.

"No me cabe la menor duda de que quieren ir por la familia para que Muñoz se entregue", dijo Eduardo Ramírez, abogado del acusado, quien señaló que "no existe ningún elemento probatorio" que lo vincule con el secuestro de Garnil.

El letrado recusó a la fiscal federal de San Isidro Rita Molina, a cargo de la investigación del caso Garnil, por las irregularidades en los procedimientos que derivaron el jueves en el allanamiento y la detención de Juan Manuel Muñoz, padre de Hígado.

Muñoz padre pidió ser indagado el viernes a última hora por el juez federal de San Isidro, Conrado Bergesio, ante quien se declaró inocente.

Según Ramírez, en su declaración dijo que "no tiene absolutamente nada que ver con los delitos y no puede ser responsabilizado por conductas o teóricos delitos que podía cometer el hijo".

El letrado negó además, que Julio Orlando Muñoz, alias Yuli, un hombre buscado por la policía en el marco de la causa, sea pariente de sus defendidos pese a tener el mismo apellido. Voceros de la investigación judicial habían señalado que Yuli era hermano del detenido y tío de Hígado.