Básquet: La primera medalla al alcance de la mano

Por caudal de jugadores, el básquet argentino tiene una oportunidad única. Jamás se dio el gusto de colgarse una medalla olímpica y esta vez tiene con qué. Claro que el oro tiene un escollo que se presenta insuperable. El Dream Team de los Estados Unidos aparece inalcanzable. Pero después todo puede ser.

Ginóbili y compañía es la camada que estuvo ahí nomás del título en el campeonato Mundial de Indianápolis 2002 cuando cayó de manera inmerecida contra Yugoslavia (hoy Serbia y Montenegro) y se dio el gran placer de cortar una racha interminable sin derrotas de Estados Unidos. Ese es el plantel que estará presente en Atenas.

El básquet argentino está en constante crecimiento y es respetado en el mundo. No es casualidad que tres de sus jugadores, Ginóbili, Nocioni y Delfino, jueguen en la NBA, antecedente único en la historia del deporte.

El conjunto que dirige Rubén Magnano apuesta fuerte por el podio olímpico y, se preparó a conciencia para concretarlo. Dejando de lado al prácticamente inexpugnable Estados Unidos, tiene varias batallas encima para que la empresa no sea cuesta arriba.

Mientras el Dream Team es el gran favorito, Argentina tendrá como principales adversarios a Lituania y Serbia y Montenegro. Todo está dado para que el seleccionado albiceleste se sume al medallero olímpico.