Armas atómicas para destruir búnkers

El tipo de armas que ayer denunció el alcalde de Hiroshima tendrá una potencia "baja" en términos del poder nuclear tradicional: alrededor de 0,5 a 3 kilotones (la bomba de Hiroshima tenía 20, y las bombas de hidrógeno que se desarrollaron a partir de los años 50, entre 50 y mil veces ese poder). Se supone que las futuras "mininucleares" deberán estallar bajo tierra, luego de penetrar la coraza blindada de un gran búnker o cuartel general subterráneo. El punto polémico es que así baja el "umbral de uso" de las armas nucleares, que permitió que no estallara la Tercera Guerra Mundial entre EEUU y la Urss pese a medio siglo de alta tensión. La llamada "destrucción mutua asegurada" hacía de hecho imposible el uso de armas nucleares. Pero ahora los estrategas del Pentágono han comenzado a idear un tipo de arma nuclear de muy baja potencia, lo que lleva a pensar en la factibilidad de su utilización en un conflicto como el de la invasión de Irak o el que podría estallar con Corea del Norte.