Sabores del mundo: Pasion en la mesa griega

Enrique Andreini / La Capital

Grecia, la "maestra de Occidente", aportó a nuestra civilización, entre otras cosas, el arte de cocinar. Con más de cuatro mil años de antigüedad, la gastronomía de Grecia es un símbolo de civilización y tradición culinaria. Aportaron ingredientes y recetas básicas como la elaboración del pan de trigo y del vino, aunque no como lo conocemos ahora ya que en su preparación intervenían muchos ingredientes.

Estudios encontraron restos de vino en antiguas ánforas selladas depositadas en algunas tumbas, los que analizados permitieron descubrir que el vino griego estaba compuesto por miel, tomillo, mirra e hierbas aromáticas. Debido a la complejidad y fuerza de sus ingredientes era necesario diluirlo con agua para poder ser bebido.

El uso juicioso y simple de hierbas aromáticas es otra de las claves de esta cocina tradicional. También debemos a los griegos la incorporación de la carne de cerdo como alimento básico en la dieta.

La cocina de pescado está asociada al uso del famoso aceite de oliva griego que aporta un sabor característico a los platos preparados.

La preparación de la comida griega tiene sus reglas y por ello los buenos cocineros son muy apreciados a pesar de la opinión en contrario de Platón a quien irritaba y veía proscriptos a los cocineros y poetas.

Otra de las particularidades de la gastronomía griega es darle suma importancia al hecho de acompañar la comida en un ambiente agradable y en grata compañía. Para los griegos compartir la comida es una costumbre de socialización muy antigua, por tal motivo, los ambientes donde se desarrolla son muy relajados, informales y pocos pretenciosos. Importa más el con quién que lo que se come.

Y si bien la cocina griega nunca llegó a la suntuosidad y refinamiento de la gastronomía romana ya que nunca tuvo la riqueza ni las posibilidades de la Roma Imperial, disfrutarla es todo un ritual y un placer.


Cordero a las brasas
El cordero es el animal de mejor carne en Grecia, sobre todo en el norte. Es común ver en las vísperas de Semana Santa a los hombres transportar sobre sus hombros un animal al que llevan a su casa para ser perfumado con laurel, orégano y pimienta negra y luego asado durante horas sobre carbón vegetal, en una tarea en la que interviene toda la familia. También, para celebrar las fiestas populares suelen rellenar hojas de vides o de espinacas con carnes, arroz o queso.

De todos los quesos el más consumido es el "feta" de elaboración tan antigua que ya Homero lo nombra en la Odisea como alimento del gigante Polythimos.

Los platos griegos son generalmente bastante bajos en grasas y calorías. De hecho, Grecia ofrece una variedad gastronómica que puede ser degustada perfectamente por consumidores de carne o vegetarianos.