El homicidio de Luis Iannotti en la zona de Riobamba al 5400

Una voz clave en la sospechada pesquisa del crimen de un jubilado

Un comisario señaló en Tribunales omisiones de un colega de la seccional 14ª. Un informe de las TOE sugería, en el caso, contactos de una banda con policías

Osvaldo Aguirre / La Capital

El titular de la Inspección de Zona VIII, comisario principal Carlos Alberto Vannelli, descargó la responsabilidad de la cuestionada pesquisa del asesinato del jubilado italiano Lino Gino Iannotti en el fallecido comisario Raúl Cortés. "Encabezó la investigación de dicho homicidio y efectuó las primeras diligencias investigativas. Era una persona muy individualista, o sea que quería esclarecer los hechos él solo, sin participación del resto del personal y de la Brigada de Investigaciones", dijo el actual jefe de la Inspección de Zona VIII, en su declaración informativa ante el Juzgado de Instrucción de la 8ª Nominación.

Además, "habíamos discutido muchas veces porque él no quería la participación de la Brigada de Homicidios por encontrarse en esa oportunidad enemistado con el comisario (José Luis) Juárez", sostuvo Vannelli, que según un informe de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) fue el superior de servicio en la seccional 14ª el 15 de abril de 2000, cuando Iannotti, de 78 años, fue estrangulado con un cinturón en su casa de pasaje Morse 2187 (Riobamba al 5400).

La actuación en el episodio de policías que revistaban en la comisaría 14ª es objeto de sospechas diversas, a la luz de un informe de la sección Investigaciones Criminales de las TOE:

* Se presume que robaron dinero de la víctima.

* Actuaron con negligencia en la escena del crimen y, presionando a un vecino, trataron de endilgarle la muerte a dos inocentes.

* El día del crimen hubo una comunicación entre el teléfono de Eva Leonor García -viuda negra hoy prófuga, que ese mismo año cometió varios robos contra ancianos- y la seccional 14ª. Vannelli admitió que conocía a la mujer.

* En el acta de procedimiento dejaron constancia que se enteraron del crimen a través de un llamado anónimo, que no investigaron. "Tal circunstancia lleva a sospechar, al menos, que se estaría desviando la investigación de su carril normal y hasta se estaría cometiendo al menos un delito", según el informe. En el libro de guardia quedó registrado que un empleado de la Agrupación de Unidades de Orden Público advirtió lo sucedido.

El abogado Norberto Olivares, que representa a la familia de Iannotti, sostiene que hubo algún tipo de intervención policial en el asesinato. "Revisado el sumario -dice- aparece con claridad, y sobre todo a partir de la información de las TOE, una relación con la fuerza policial. Queremos determinar cuál es el carácter de esa relación: si la presunta banda operó con la participación de algún integrante de la fuerza podría corresponder la hipótesis de una asociación ilícita; residualmente cabría investigar la cuestión de un encubrimiento".


"Más que sospechoso"
El 15 de abril de 2000, a las 15.43, horas antes del crimen, se registró un llamado desde el teléfono de Eva Leonor García -correspondiente a un departamento de Pellegrini al 1400- al teléfono de la comisaría 14ª. La comunicación se habría extendido durante tres minutos y fue considerada "más que llamativa y sospechosa" en el informe de las TOE, "siendo esa la única llamada realizada desde ese departamento y número en los meses de marzo y abril del año 2000 a la comisaría 14ª".

Vannelli negó haber atendido ese llamado, aunque reconoció que la viuda negra era una conocida y ese año lo había contactado porque "tenía unos datos para trabajar". La voluntad de colaborar con la policía parece haberse dado, de parte de García, mientras cometía robos contra ancianos y por los cuales fue procesada.

"La conocía porque era informante de la sección Robos y Hurtos, a la cual yo pertenecía -dijo Vannelli-. Los jefes de la sección Robos y Hurtos mientras estuve yo eran Storani, Quiroz, Ruggiero y Zárate". El último y otros efectivos salieron eyectados de la sección cuando se denunció una maniobra extorsiva al estilo mafioso contra un empresario de Cochabamba al 5400, en septiembre de 1996.

"Eva García no fue informante mía durante los cuatro años que yo estuve en la Brigada (de Robos y Hurtos) sino durante los últimos meses. Tampoco teníamos una relación fluida ni un contacto frecuente, era muy ocasional", dijo Vannelli.

Los contactos volvieron a producirse cuando Vannelli recaló en la seccional 14ª. El entonces subjefe de la comisaría dijo que la derivó primero a la Brigada de Investigaciones, la sucesora de Robos y Hurtos, aquella sección que tuvo a García como colaboradora. A la vez "derivé a Eva García al comisario Aguilar y no tenía nada que ver con la presente investigación".

Aguilar era el jefe de la sección Seguridad Personal, que en septiembre de 2000 detuvo en Villa Gobernador Gálvez a Nanci Basualdo, compañera de andanzas de García. La soplona, sin embargo, logró mantenerse en libertad, hasta que la apresaron las TOE.

Al declarar ante la Justicia, Vannelli dijo que concurrió a la casa de Iannotti al conocerse el crimen, pero dejó traslucir que tiene un recuerdo borroso de los hechos y aseguró haber sido ajeno a las actuaciones.

En concreto, el comisario principal tomó distancia de la pista falsa que según se sospecha fue urdida en la seccional 14ª para envolver a dos inocentes en el asesinato. "Creo que a los dos días del hecho -declaró Vannelli- me citó Cortés a mi domicilio por teléfono. Era de noche y me dijo que tenía un testigo muy importante y quería que vaya para la comisaría", relató.

Vannelli obedeció la orden, y una vez en la comisaría "escucho el relato de un testigo, el que me enteré que lo había traído el cabo primero Picerni, porque habían sido compañeros de promoción". Se trataba del ex policía Rubén Román Gutiérrez, quien narraba "que había escuchado por parte de un vecino del fallecido Iannotti que cree que había visto a dos personas" sospechosas por el crimen.

El vecino aludido declaró que Gutiérrez -quien enfrenta ahora la posibilidad de ser imputado por falso testimonio- y policías de la seccional 14ª lo presionaron para que acusara a uno de los inocentes detenidos por el crimen.

La identidad de los homicidas es todavía una incógnita. Al respecto, en la investigación aparecieron dos elementos:

* El asalto a la casa de Iannotti habría sido premeditado. Los homicidas aparecieron al día siguiente que Silvana Iannotti, hija de la víctima, emprendiera un viaje y el jubilado quedara solo en la casa.

* Poco antes del crimen, Lino Iannotti dijo que había conocido a "dos mujeres del Pami". Según una pesquisa judicial, ese recurso fue utilizado ese mismo año en varios casos en que viudas negras robaron a ancianos.

¿Dónde está? La policía lleva más de dos años sin ubicar a Eva García.