Año CXXXVII Nº 48389
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
La Región
El Mundo
Policiales
Economía
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Escenario
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Salud 12/05
Autos 12/05
Turismo 09/05
Mujer 09/05
Economía 09/05
Señales 09/05


contacto

servicios

Institucional

 domingo, 16 de mayo de 2004

Refugiados en la montaña

Una noche en un refugio de montaña es toda una experiencia en sí misma. Ubicadas en medio de las sierras, estas construcciones sencillas invitan al compañerismo. Allí la gente no tarda en sentarse en la misma mesa aunque no se conozca. El montañismo es tema obligado de charla, aunque sirva para disparar conversaciones sobre cualquier tópico. El albergue de la rotonda tiene un comedor grande con mesas chorizo y una sola habitación donde se suceden las cuchetas de tres niveles. Cada uno acomoda su bolsa de dormir y vuelve al encuentro alrededor del mate. La comida se comparte. Cuando la luna llena ilumina el lugar se puede salir y caminar campo traviesa sin ni siquiera encender las linternas y ver cómo la luz pega en el compacto rocoso. El cielo del macizo es increíblemente diáfano. Desde la cocina llega el olor de la comida que hacen los caseros y que se mezcla con el de la que hacen los montañistas. La mezcla de aromas abre el apetito. Los platos esperan en las mesas protegidas con manteles de tela y hule. El guiso caliente ayuda a reponer las energías perdidas durante una jornada de caminata y a juntar reserva para la escalada en la roca del día posterior.

Por la noche, el viento sopla con tanta fuerza que se escucha con una intensidad inusual incluso desde las bolsas de dormir que tapan hasta la cabeza. Por la mañana todo vuelve a la normalidad. De a poco el refugio va tomando vida y los que se alojan van preparando sus pertrechos para ganar la roca. Después de una jornada, el visitante percibe que el refugio es parte indivisible de la aventura

enviar nota por e-mail

contacto
buscador

Notas Relacionadas
Córdoba: Un gigante que invita a la aventura


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados