| domingo, 16 de mayo de 2004 | Contra la violencia Por fin se aplicó el derecho de admisión En un hecho sin antecedentes en la historia del fútbol argentino, Racing aplicó ayer por primera vez el derecho que tienen los clubes locales a impedir el ingreso al estadio de simpatizantes que hayan tenido conductas violentas, aunque formen parte de la hinchada local.
Antes del partido contra Newell's fueron detenidas 30 personas, 20 de las cuales por averiguación de antecedentes en distintos incidentes que se produjeron en las inmediaciones de la cancha. Las otras 10 personas fueron detenidas cuando quisieron ingresar al estadio y se comprobó que sus rostros estaban registrados en un banco de datos de unas cien caras, que la Policía Federal tenía a la vista en los monitores de varias computadoras colocadas directamente junto a las puertas de ingreso a la tribuna popular local.
Si bien la legislación conocida como "derecho de admisión" estaba vigente, en la práctica nunca, hasta ayer, había ocurrido que un club la aplique e impida el ingreso de sus propios hinchas, sobre todo "los caracterizados o más específicamente barras bravas en sus distintos modos, estilos y grados de agresividad".
Para llegar a la aplicación del derecho de admisión Racing viene trabajando con el Comité Provincial de Seguridad Deportiva y la Policía Federal desde hace tiempo. "Esto no se puede hacer de un modo improvisado, hay que estudiar el tema y sobre todo tomar la decisión política", le dijo Gustavo Lugones, agente letrado del comité, en exclusiva a Ovación.
La tribuna cabecera de Racing tuvo un aspecto inusual. Casi sin banderas y ocupada en su totalidad por hinchas comunes o no caracterizados. Fuentes de la dirigencia del club contaron que muchos integrantes de las tres vertientes que tiene la barra brava de Racing -La Guardia Imperial, La 95 y Los Stones- directamente ayer no concurrieron a la cancha.
La implementación del derecho de admisión en Racing se inició ayer y prometen que será para siempre. Incluso proyectan para el 2005 sacar los alambrados detrás del arco donde se ubican los hinchas locales.
"¿No le parece que un estadio de fútbol, como en Europa, es un sueño algo utópico para la idiosincrasia de los argentinos?", preguntó Ovación. "Mire, hay que tomar la decisión y hacerlo. No es tan difícil. ¿Usted cree que los dirigentes de los demás clubes no saben quiénes son los tipos que les crean problemas? Pero sin embargo los dejan entrar", aseguró Lugones. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Diez hinchas de Racing no pudieron ingresar al Cilindro de Avellaneda. | | |