La sombra de Priebke llega hasta Aspen

El pasado en Bariloche del criminal de guerra alemán Erich Priebke, deportado a Italia en 1995 y condenado a cadena perpetua por la masacre de las Fosas Ardeatinas, generó malestar en la comunidad judía de Aspen (Estados Unidos), que cuestionó a sus autoridades por firmar un convenio de hermandad con Bariloche.

El debate en Aspen adquirió un nivel de controversia cuando la alcaldesa de esa ciudad, Helen Klunderud, defendió el convenio y restó importancia al asunto. Esa respuesta generó una reacción airada de la comunidad judía, que obligó a la alcaldesa a publicar en un diario local una carta de disculpas.

Además, la funcionaria tuvo que pedirle a su par de Bariloche, Alberto Icare, que envíe una nota explicando que la ciudad tiene una clara posición antinazi y que no existe espacio para la discriminación.

Icare respondió ayer a Klunderud, a quien le recordó que el gobierno comunal se expidió claramente en numerosas oportunidades contra el nazismo y todas las formas de discriminación y violencia.

Señaló que en Bariloche no existe militante nazi o sector alguno que profese esa ideología, como así tampoco problemas con actitudes discriminatorias de alguno de sus vecinos. (Télam)