A poco más de cuatro meses pasaron de la desolación a planificar el futuro

Se recuperan a buen ritmo pueblos castigados por el tornado de 2003

Arminda, Pueblo Muñoz y Acebal, revitalizados. En Pavón Arriba aún falta alumbrado público y otras obras

Carlos Pulvirenti / La Capital

El 11 de noviembre del año pasado un tornado azotó varias localidades del sur provincial, como Pavón Arriba, Arminda, Pueblo Muñoz y Acebal, que padecieron la violencia del fenómeno. A poco más de cuatro meses de la catástrofe están reconstruyéndose a buen ritmo y ya muestran obras concretas de su recuperación.

Arminda, con 400 habitantes -ubicada a unos 40 kilómetros al sudoeste de Rosario sobre la ruta 14- sufrió graves daños: la voladura de techos de casas y de las tejas de la escuela provincial Nº 235, como también gran número de silos arrasados.

"Hoy el 70% de los silos ya están reconstruidos, las casas y galpones fueron arreglados y a la escuela -gracias a un subsidio provincial de 104.000 pesos- se le refaccionó el techo a nuevo. Ya funciona con unos 70 alumnos que concurren hasta el 9º año de la EGB", contó el presidente comunal Juan Ciriaco Zampa, quien además acotó que unos 40 jóvenes son trasladados de lunes a viernes gratuitamente por la comuna hasta Villa Mugueta para que asistan al polimodal.

El pueblo pasó de la desolación de hace unos meses a realizar proyectos para su crecimiento. "Nuestra localidad posee las calles pavimentadas, no hay desocupación y no existe déficit en las finanzas. Además el Samco tiene una ambulancia cero kilómetro", sintetizó Zampa. Asimismo dijo que se analiza la forma para que la comunidad tenga provisión de gas en red.


Pueblo reactivado
Pueblo Muñoz, con 510 habitantes y a 28 kilómetros de Rosario, también fue castigado por el tornado. El viento derrumbó las torres de iluminación de la cancha del Club Atlético Puerto Belgrano y arrancó de cuajo galpones con herramientas, semillas y maquinarias. También voló techos de casas del Plan Fonavi y redujo un monte de eucaliptos. En el pueblo hoy ya se arreglaron los techos destruidos de las viviendas con subsidios provinciales y se asistió logísticamente desde la comuna para reconstruir galpones. Se compraron equipos de motosierras para reacondicionar la zona de árboles caídos y se compró un generador eléctrico destinado a emergencias. Además de haberse arreglado cuatro casas Fonavi afectadas, ya está en marcha la construcción de seis más.

Con 20 mil pesos del Fondo de Asistencia Educativa (FAE) y la colaboración del pueblo se arregló y pintó la escuela Nº 151 Domingo Sarmiento.

"En Pueblo Muñoz hay tres empresas cerealeras y por la ruta 14 -desde la apertura del puente a Victoria- se incrementó el tránsito y pasan gran cantidad de camiones, muchos vienen desde Brasil", afirmó el titular comunal Alberto Gunegondi. Además acotó: "Esta es una zona muy productiva, el 90 % se dedica a la actividad agrícola y ganadera, un 5% fabrica muebles y el resto provee bienes y servicios. El pueblo posee agua potable, luz, teléfono, TV por cable, Internet y transporte interurbano. Ultimamente notamos una creciente demanda de lotes para radicación y construcción de casas de fin de semana".


Rápida recuperación
Por su parte, el titular de la comuna de Acebal, Rogelio Ciliano, afirmó que la recuperación de su pueblo fue muy rápida y sólo quedan algunas casas por terminar de reparar. En este sentido, reclamó al gobierno provincial la entrega de un subsidio de 25.000 pesos, "que no es tanta plata pero nos va a alcanzar para eso".

"Hoy en Acebal casi no se ven vestigios del tornado -consideró Ciliano-. Es porque tenemos un pueblo compacto, en cuanto a su aspecto, y tratamos de mantenerlo lo mejor posible. Además todos colaboraron en la recuperación".

El techo de la escuela 235 de Arminda se hizo de nuevo.