Un mal fallo para cada uno

El partido fue tan intenso que obviamente dio para varias polémicas. La primera ocurrió a los 27', cuando Pablo Sánchez despejó sobre la línea de sentencia una pifia de Carbonari (ver Los momentos). El mismo Vitamina confesó que para él había entrado pero el asistente no lo vio así. Un minuto después, Claudio González recibió una gran asistencia de Ferrari, giró dentro del área y Bovaglio le cometió penal. Bassi no lo entendió así y le sacó encima amarilla al delantero canalla. Antes, hubo varios agarrones a Jiménez en el área canalla que tampoco el árbitro consideró falta.