Talleres se afianza en la punta

El equipo de Jota Jota venció a Gimnasia 1 a 0 con gol de Cuba y sigue arriba

Talleres quedó transitoriamente como único líder del Clausura, al derrotar ayer en el Olímpico de Córdoba a Gimnasia y Esgrima La Plata por 1 a 0, en un encuentro adelantado por la 5ª fecha del Clausura. El único gol del partido fue convertido por el ingresado Pablo Cuba, a los 32 minutos del segundo tiempo, ante unos 35 mil simpatizantes cordobeses que vivaron al equipo revelación del torneo y único puntero con 13 puntos, al menos hasta que hoy River juegue ante Banfield.

En un primer tiempo para el olvido, Talleres extrañó en demasía la presencia de su máxima figura, el delantero y goleador uruguayo Víctor Piriz Alvez, quien debió cumplir con una fecha de suspensión.

Precisamente la situación que abonó esta percepción fue que la única jugada de riesgo que tuvo el equipo de Jota Jota ocurrió cuando el arquero de Gimnasia, Juan Carlos Olave, respondió ante un disparo de Perrone.

Gimnasia, en tanto, insinuó con algunos chispazos de Lucas Lobos en la creación, sumada a la contención y a la buena marca que realizaron Lucas Licht y Andrés Yllana en el medio. A los 20', Luis Rueda desperdició una buena acción para Gimnasia, al apresurarse en un remate sin convicción al arco, en lugar de ceder el balón a sus compañeros que estaban en mejor posición de gol.

El complemento fue similar a la primera parte, cuando ambos equipos se estudiaron más de la cuenta. Igualmente Talleres era más ambicioso y aunque sin claridad dominó al adversario ante un rival que se fue cayendo desde el llamativo cambio que realizó el técnico Griguol, al sacar a Lobos, la figura de Gimnasia, y poner a Madrid.

Sin embargo, el técnico Juan José López, preocupado por la falta de gol de su equipo, hizo ingresar a Pablo Cuba, a los 20', en reemplazo del juvenil Perrone. Precisamente el propio Cuba se transformó en el héroe del partido, al tomar un rebote tras un envío de Salas y, luego de una serie de amagues, batió con un remate bajo a Olave para definir el partido y desatar la locura de los cordobeses.

Sobre el final, Talleres respiró aliviado cuando Gutiérrez respondió ante un potente cabezazo de Herner con destino de gol.

El final del partido derivó en la alegría de todos los jugadores, quienes se abrazaron a otro triunfo, ante una multitud que no paró de vivar al arquero Gutiérrez y al goleador Cuba, los héroes de la tarde. (Télam)