Acusan a una burocracia "parasitaria" de impedir que Rosario tenga autonomía

El municipio retrucó a un gobierno provincial que se muestra reacio a ceder la facultad de recaudar tributos

El municipio abrió ayer un nuevo round en su lucha por la autonomía de Rosario al afirmar que "para que la ciudad sea realmente autónoma en lo político e institucional hay que otorgarle la autonomía financiera". De esta manera, la Municipalidad salió al cruce del ministro de Gobierno de Santa Fe, Alberto Gianneschi, quien anteayer se mostró a favor de que Rosario sea políticamente autónoma pero no de que tenga la facultad de recaudar los tributos e impuestos que hoy ingresan a las arcas santafesinas. A la hora de analizar por qué Rosario no goza de un derecho que le confiere la Constitución nacional desde hace diez años, el gobierno local apuntó contra una "burocracia parasitaria y privilegiada que somete a Santa Fe en su propio beneficio".

El anuncio del intendente Miguel Lifschitz de realizar en junio próximo un plebiscito para definir los alcances de la autonomía que quieren los rosarinos abrió un nuevo capítulo en la ya histórica lucha que tiene el municipio con la provincia por este tema. Es que si Rosario contara con esta facultad, hasta ahora negada por falta de voluntad política de la provincia, podría tomar decisiones que hoy están en manos del gobierno santafesino.

Desde el punto de vista político tendría la facultad de definir su propia forma de gobierno: el número de concejales, su forma de elección, la revocatoria de mandatos y la consagración de la descentralización municipal. A nivel económico, en tanto, podría crear o modificar tributos e impuestos que históricamente llegan a las arcas provinciales, y que luego se coparticipan a municipios y comunas.

Que el municipio goce de este último derecho es lo que justamente preocupa al gobierno provincial. Y esto quedó en evidencia cuando, consultado por La Capital, el ministro de Gobierno de Santa Fe dijo anteayer que "no habría problemas" en otorgarle la autonomía política a Rosario pero que la económica habría que "discutirla y analizarla porque los impuestos provinciales los debe recaudar lógicamente el gobierno santafesino".

El municipio salió inmediatamente al cruce de estas declaraciones al asegurar que "para que Rosario sea políticamente autónoma hay que otorgarle la autonomía económica". Es que, según dijo el coordinador general de Gabinete de la Municipalidad, Angel D'Ambrosio, la autonomía financiera es la "posibilidad de aplicar la recaudación por impuestos y tributos en las instituciones básicas, el poder de policía y los servicios públicos municipales, que son la columna vertebral del Estado municipal".

Por eso, para D'Ambrosio este reclamo no debe "confundirse con la supuesta pretensión de aumentar impuestos o establecer dobles imposiciones. Ese análisis -que fue el que hizo anteayer Gianneschi- sólo puede responder a una extrema superficialidad o a una evidente mala fe", consideró el funcionario municipal.


Recursos desiguales
Para D'Ambrosio resulta "notorio que el municipio de Rosario históricamente percibió sus recursos en forma más eficaz que la provincia". Por eso considera que sería indispensable que Rosario tuviera la facultad de cobrar el impuesto inmobiliario y la patente automotor que hoy recauda la provincia (y luego coparticipa a municipios y comunas).

Si de hablar de desigualdad se trata, un estudio realizado por la Fundación Apertura revela las diferencias presupuestarias que rigen en territorio santafesino. Del análisis de los últimos presupuestos provinciales se desprende que mientras el gasto público de los recursos de la provincia alcanza en el departamento La Capital unos 1.300 pesos por habitante, en Rosario esa cifra desciende a 548 pesos.

Lo mismo sucede con la inversión del gobierno provincial en materia de obra pública (según el presupuesto aprobado del 2003): mientras en el departamento La Capital se destinaron 47 pesos por habitante, en Rosario ese número no llega a 8 pesos.

"Estos datos indican la necesidad de alcanzar la autonomía económica y financiera y ponen en claro cuáles son los reales motivos de quienes avalan la autonomía en un nivel platónico pero jamás intentaron llevarla a la práctica", manifestó D'Ambrosio.

Y para el funcionario municipal, no son desacuerdos político partidarios los que traban este derecho para la ciudad, sino una "burocracia parasitaria y privilegiada que somete a Santa Fe en su propio beneficio".