Provincia y municipio asisten a familias vulnerables

Tanto la provincia como el municipio tienen programas de acción para atender a familias y chicos en riesgo social. La directora de Minoridad y Familia de la provincia, Graciela Martinet, informó que en la delegación rosarina se atienden unas 300 consultas por mes de personas que denuncian situaciones de violencia, maltrato o indefensión de chicos. "Golpea mucho el problema del abuso sexual y en particular la transgresión a la prohibición del incesto, que estamos viendo cada vez más, lo que significa un problema cultural grave", aseveró Martinet.

La funcionaria admitió que durante años se trató de reforzar a los chicos de la primera infancia, es decir hasta los seis años. "Creo que ahora hay que poner el acento en la asistencia a los niños de entre siete y catorce años que no están escolarizados y que están francamente desamparados", apuntó.

En ese sentido, destacó que la provincia tiene en Rosario cinco centros de atención de día que fueron pensados hace más de 40 años para asistir a los chicos cuyas madres trabajaban. "Esa situación cambió radicalmente y ahora en esos sitios se atienden entre 70 o 80 chicos con muchas dificultades", señaló.

La funcionaria dijo que la internación de las víctimas es el último recurso que se evalúa. "Tenemos institutos para situaciones muy complicadas como el abuso sexual, donde en realidad se termina judicializando a la víctima, pero hay que hacerlo para prevenir futuras agresiones hacia esos chicos", argumentó. De hecho, al día de hoy hay unos cien menores alojados en diversas dependencias provinciales, además de otros que asisten a madres solteras o menores con discapacidades mentales.

También la Municipalidad tiene programas para asistir a los sectores más vulnerables. El área de Niñez, que depende de la Secretaría de Promoción Social, está en este momento asistiendo a 213 familias en situación de calle que implican a menores.

Estos pueden directamente vivir en la calle o deambular solos o trabar con algún adulto familiar. El equipo municipal intenta en estos casos que los chicos vuelvan a la escuela y asistir a la familia de modo tal que pueda dejar la calle como medio de vida.

Además, el municipio también trabaja con unas 320 familias en situación de riesgo, que también incluye los malos tratos, el abandono y el abuso sexual. Según se indicó desde esa repartición, ese trabajo se hace en terreno, es decir, en la zona donde se desarrolla o aparece el conflicto.

Así, trabajadores sociales y psicólogos atienden cada caso en particular de acuerdo a las necesidades de cada situación. Es decir, un seguimiento semanal, mensual o de mayor periodicidad.