Fin de la protesta en Riccheri y Zeballos

El director del Servicio Penitenciario (SP), Fernando Rosúa, anunció ayer la finalización de la huelga de hambre que habían iniciado el lunes los internos de la Unidad Nº 3 de Rosario, quienes reclamaban por la modificación del régimen de calificación de la conducta y que se restituyeran los beneficios de trabajo y salidas transitorias a quienes gozan de buen concepto, entre otras medidas. Los representantes del SP se reunieron por la tarde con los delegados de los pabellones y acordaron reforzar la atención de los enfermos de sida, habilitar un mecanismo de acercamiento familiar a quienes se encuentran lejos de su grupo familiar y establecer un cronograma de reuniones periódicas para ir resolviendo los otros puntos del petitorio.