Chubut: Asalto a La Trochita

El pasado fin de semana un simulacro de vandalismo sorprendió a los pasajeros del antiguo expreso patagónico

La Trochita, el antiguo expreso patagónico, fue "asaltado" el fin de semana pasado por bandoleros a caballo que detuvieron el tren en plena meseta de Chubut y "exigieron" a los pasajeros una donación para comedores escolares, en una puesta en escena para los turistas que, después del susto inicial, se mostraron entusiasmados con la iniciativa.

El tren había partido de Esquel, rumbo a Nahuelpán, cargado de turistas -la mayoría extranjeros- y algunos lugareños, y a mitad de su recorrido fue rodeado por una veintena de jinetes que ostentaban armas largas y cortas y municiones mientras galopaban junto a los vagones.

Los pasajeros se miraban unos a otros sorprendidos y observaban a los forajidos que, con las caras semicubiertas, los acechaban cada vez desde más cerca hasta que obligaron al maquinista a detener la marcha.

"¡Nos asaltan...!" gritó una señora y cuando otros pasajeros comenzaban a entrar en pánico al ver a los ladrones dentro del tren, un guarda los tranquilizó, al explicarles que todo era un simulacro o puesta en escena de cómo eran los asaltos al ferrocarril hace más de cien años.

Esta inédita iniciativa organizada por la Dirección de Turismo de Chubut, se basa en hechos reales, recrea la época cuando la Patagonia era asolada por verdaderos y temibles bandoleros como Butch Cassidy y Sundance Kid.

Como en las películas del lejano oeste norteamericano, los bandoleros toman por asalto el tren en el "lejano sur" argentino, pero no roban dinero ni pertenencias, sino que piden a los turistas una colaboración voluntaria para los comedores escolares y centros maternales de Esquel.

Para darle más realismo al asalto, los bandoleros "raptaron" a una mujer que iba en el tren, quien en realidad era la esposa de uno de ellos.

En esta primera experiencia, salvo unos pocos periodistas que viajaban a bordo, el personal del tren y la mujer "raptada", nadie sabía lo que ocurriría en el trayecto. Los asaltantes se dirigieron a los turistas en castellano e inglés y cuando los pasajeros depositaban su contribución voluntaria para obras solidarias, les regalaban a cambio un perfume.

Entre los supuestos forajidos estaba el ex jefe de la Unidad Regional de la policía de Esquel, Néstor Azócar, y muchos de los otros son gente de la zona, jinetes expertos y vaqueanos, dispuestos a colaborar con la Dirección de Turismo.

La actuación fue celebrada con entusiasmo por los turistas, quienes a bordo del antiguo expreso recorren los paisajes patagónicos que alguna vez fueron escenario de los mismos hechos.

Cuando terminó el asalto, la gente ovacionó a los bandidos. Muchos llegaron a la localidad de Esquel y no paraban de hablar de la inédita experiencia de haber sido "asaltados".

Para los organizadores la iniciativa fue un éxito y la intención es seguir poniéndola en práctica. La Trochita hace cinco viajes mensuales en temporada alta, con los recorridos Esquel-Nahuelpan, El Maitén-Desvío Thomae y Esquel-El Maitén y dos veces es contratado como charter. En cualquiera de ellos puede suceder el asalto en forma sorpresiva.(Télam)

Los jinetes acechan al tren ante la sorpresa de los pasajeros.