| domingo, 01 de febrero de 2004 | El sobresalto de los vecinos Los vecinos de la familia Segovia ayer se despertaron con la noticia de la tragedia. Sólo Claudia, que vive casi pared de por medio con ellos, escuchó a la madrugada ocho disparos de arma de fuego. "Después sentí llorar a una de las nenas y a ella (por Isabel Igarza) que decía «viste que era una joda». Sinceramente pensé eso, que era una broma y me fui a dormir. Esta mañana me enteré de todo", comentó. Hugo y Osvaldo viven en el centro del pueblo pero también, como muchos, conocían a la pareja y a sus cuatro chicos. Ayer, a pesar de que los caminos internos de Soldini eran un lodazal, se acercaron a la vivienda. "No lo podemos creer. Yo vine para ver si era cierto esto que pasó", balbuceó Osvaldo. Nadie podía prever un final así. "A la mujer no se la veía nunca, estaba como encerrada. El (por Segovia) se encargaba de los chicos, los llevaba a la escuela, hacía las compras. Hace dos días lo vi sentado en la plaza con la más chica. Era un tipo de primera, muy educado", agregó un habitante de la zona. Otro, visiblemente ofuscado, añadió: "Esta mujer les arruinó la vida a los chicos". enviar nota por e-mail | | |