| miércoles, 14 de enero de 2004 | Vuelvan cuando quieran El sindicalista, a quien sus íntimos suelen llamar "Toro Sentado", y un amigo que se propusieron pasar un rato agradable junto a sus esposas en un restaurante de Villa Gobernador Gálvez casi provocan un infarto al dueño del negocio. Las parejas, además de deleitarse con el espectáculo folclórico y el menú de pescado que se ofrecía en Mi Casa, consumieron con fruición más de una botella de champán francés. Copa va, copa viene, decidieron finalmente terminar la velada y partieron. Pudo apreciarse entonces el estado físico del propietario del local que, raudo, los corrió hasta alcanzarlos para pedirles que rectificaran un pequeño olvido: pagar. Tras las disculpas del caso, así lo hicieron y todo terminó en paz. Qué olvidadizos.
| Tres que comieron bien Otro que no la pasó como hubiera querido fue el concejal Jorge Boasso. Gentil, el radical se propuso compartir con una veintena de invitados la celebración del fin de año en la casa de su novia en Roldán. Pero sólo asistieron tres. Lo peor fue que la mayoría de los ausentes estaban en otro convite similar, en la casa de un vecino. Pero fiel a su carácter, Boasso no se rinde. Asegura con insistencia que ahora va por el ballottage. Puede ser que que esta vez no sobre comida.
| Entre gallos y medianoche Una localidad enclavada a la vera del río Carcarañá fue la elegida el pasado fin de semana por una cantidad inusitada de visitantes que estacionaron sus vehículos último modelo en los alrededores de un enorme galpón. El calor reinante bajo las chapas no logró detener las ansias de esparcimiento de los sorpresivos turistas, que participaron de un espectáculo tan aglutinante como poco edificante: una riña de gallos. Al parecer este tipo de reuniones va cambiando de localidad cada fin de semana y, si bien el público se renueva, ya se habla de un elenco estable de habitués. Lo cierto es que la modalidad de cambiar permanentemente el escenario sería la razón que desorienta a los guardianes del orden, predispuestos como siempre a hacer cumplir la ley.
| Trasnochador por obligación Después del encuentro entre Luiz Inácio Lula Da Silva y George W. Bush, el canciller argentino compartió un café con su par brasileño, Celso Amorim, para evaluar los resultados y preparar la reunión entre el presidente norteamericano y Néstor Kirchner. Así lo confirmó en Monterrey el propio Rafael Bielsa, quien destacó que en la cumbre de las Américas busca mantener la mayor cantidad posible de contactos con sus colegas. "Antes de irme a dormir anoche, a la una de la mañana tomé un café con mi par brasileño Celso Amorim, que venía de una reunión de Lula con Bush", reveló el rosarino ayer temprano. "Uno trata de acumular la mayor cantidad de información posible y transmitírsela al presidente", explicó. Queda claro: el ministro de Relaciones Exteriores no trasnocha por cualquier cosa.
| En busca de foto y saludo El ex ministro de Economía durante el gobierno de Fernando de la Rúa y actual titular de la Cepal intentó reunirse con el presidente Néstor Kirchner o, en su defecto, con Roberto Lavagna. Para tal fin se acercó ayer al Hotel Quinta Real de Monterrey, donde se aloja la delegación argentina. Como sabe que no es bienvenido, José Luis Machinea bromeó con los periodistas al decirles: "Tápenme, que no me vea Kirchner". Finalmente se desconoce si el ex funcionario, que también integró la administración de Raúl Alfonsín, logró cumplir con su objetivo. | | | | "Latinoamérica puede ser el segundo Vietnam" Evo Morales Líder indigenista boliviano | Ver noticia | | Capricornio - 22/12 al 19/01 | | | |